Un paseo a las playas cordobesas marcó el final de un grupo de venezolanos, cuatro hombres y una mujer, cuyos cuerpos han sido encontrados en distintos parajes de la zona rural del municipio de Canalete, en el departamento de Córdoba.
De los cinco jóvenes que salieron a divertirse, han encontrado los cuerpos de tres en las últimas 24 horas, mientras que los otros dos aún están desaparecidos.
De acuerdo con la información suministrada por los familiares, los cinco amigos son de Carabobo, Venezuela, que habían llegado a Colombia a buscar mejores oportunidades de vida.
La última vez que se comunicaron con sus familiares en el vecino país fue el viernes anterior cuando les enviaron una fotografía en la cual aparecían felices en un paseo de playa.
Los dos primeros cuerpos en ser encontrados fueron el de uno de los hombres y la única mujer que estaba con ellos. Fueron abandonados en jurisdicción de la vereda Chaparral, corregimiento de El Tomate.
El hombre fue identificado por sus familiares como Ronald Alexander Mendoza Quevedo, mientras que de la mujer, de piel negra y aproximadamente 30 años, aún no ha sido identificada.
De la tercera víctima tampoco hay datos. Se trata de un hombre descamisado y con pantaloneta color negra y blanca, encontrado en el sector conocido como Pueblo Regao, también en jurisdicción de Canalete, quien registra heridas con arma de fuego en distintas partes del cuerpo.
De acuerdo con lo señalado por el comandante de Policía en Córdoba, coronel Jairo Baquero, los tres tienen heridas de bala y no tenían ningún tipo de documentos que permitiera identificarlos.
Con relación a la pareja que encontraron primero, señaló que ambos estaban semidesnudos, la mujer con blusa y ropa interior y el hombre con una pantaloneta azul y tenía un escapulario tatuado en la pierna.
Los habitantes del lugar le dijeron a la Policía que a las dos de la madrugada habían escuchado los disparos y que esperaron las horas de la mañana para asomarse al lugar, pero que no reconocieron a las víctimas. Luego la autoridad confirmó que ambos tienen signos de violencia en varias partes del cuerpo, manos y pies, lo cual los hace presumir que fueron llevados a la fuerza a ese lugar.
El oficial no se atrevió a señalar alguna hipótesis en torno a lo ocurrido, pero insistió en que están haciendo las investigaciones correspondientes con el fin de establecer si fue un crimen cometido por el frente Zuley Guerra de las bandas criminales que operan en la zona.
Fuente: El Universal de Colombia