La madrugada de hoy, explotó un carro bomba frente a un mercado de verduras, en Afrín, en el noroeste de Siria, dejando al menos 10 muertos y 30 heridos, incluyendo menores de edad.
Según la ONG, además de los daños a personas, también causó daños materiales e incendios en una estación de servicio de gasolina cercana al lugar de los hechos. Asimismo, varios bienes raíces quedaron totalmente carbonizados.
Automáticamente bloquearon el paso de las carreteras que tenían acceso al mercado.