En la edificación habitan cerca de 150 familias, de acuerdo con el registro de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción, pero nadie sabe cómo se originó el siniestro
El pasado domingo 10 de noviembre, Yodarlib Gutiérrez se despertó por el calor y el olor a humo. A las 7:00 am comenzó a sacar a sus dos hijos, de 3 y 5 años, del piso 14, lugar que comparte con otras 30 familias en la Torre Viasa, ubicada en la parroquia Candelaria, conocida por ser una invasión desde 2006.
Media hora después, el cuerpo de Bomberos de Distrito Capital comenzó a evacuar la edificación en la que habitan cerca de 150 familias, desalojó los pisos 12, 13 y 14, de acuerdo con el registro que lleva el consejo comunal a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (Clap).
A Yodarlib, luego de bajar los cuatro pisos, la atendió una unidad de emergencia: “Se me fueron los tiempos; no sé, por el fuego, digo yo”, manifestó.
Nadie sabe cómo inició el incendio y los funcionarios de rescate tampoco emitieron un comunicado para explicar el hecho. Pero lo que todos dicen es que dentro hay tanto aceite como para incendiar la torre completa, porque la mayoría de las personas se dedican a la producción y venta de tostones.
Luego de dos horas controlando el accidente, en la cuadra que da a la entrada de la torre había dos camiones de los Bomberos de Distrito Capital, uno para el incendio y otro como centro de operaciones; dos camiones tipo cisterna; dos ambulancias; una patrulla de Protección Civil y una unidad de los Bomberos Universitarios UCV.
María Jesús Vallejo/El Pitazo