María Teresa Belandria, embajadora del Gobierno interino de Venezuela en Brasil, ofreció una entrevista en la que explicó cómo fueron los hechos ocurridos en la Embajada, sede diplomática donde se registró un altercado entre los funcionarios del mandatario encargado Juan Guaidó y adeptos al régimen de Nicolás Maduro.
“Recibimos de funcionarios de carrera de la Embajada quienes nos manifestaron que reconocían al gobierno del presidente Juan Guaidó y que en consecuencia podíamos acceder a los espacios de la embajada con ellos, y así lo hicimos, de manera pacífica, con el control remoto, con las llaves de seguridad, es decir, ingresamos con los funcionarios que entregaron de manera voluntaria las llaves de la embajada de Venezuela en Brasil”, contó.
“Trascurrió un par de horas y se presentaron afuera de la sede grupos muy exaltados liderados por el general de división Manuel Antonio Barroso, agregado militar del régimen en Brasil quien, además, fue el presidente de CADIVI por ocho años acompañado de un grupo de personas no venezolanas, muy violentas”, agregó.
La diplomática selañó que “valiéndose de su rango militar irrumpió a la fuerza en nuestra embajada y allí se produjeron unos hechos violentos donde hay dos personas heridas, no son de gravedad, y procedieron entonces en una suerte de arrebato eufórico a llevarse por delante todo lo que encontraron”.
“Fueron llegando cada vez más grupos civiles convocados por las autoridades ilegítimas usurpadores de la embajada, miembros de los partidos políticos brasileños afectos al oficialismo en Venezuela y la situación se tornó realmente un tema de seguridad para nosotros, que estábamos poniendo en riesgo la vida de todo nuestro personal, y allí en conformidad con las autoridades brasileñas decidimos abandonar la sede pacíficamente como entramos”.
Belandria resaltó que el régimen se aferra a las embajadas “porque sabemos que dentro de las embajadas de Venezuela a lo largo y ancho de nuestra región se tejen toda suerte de negocios y de corruptelas, y porque sabemos que en los últimos tiempos las embajadas ocupadas por los funcionarios del régimen son el sitio de concentración y reunión para planificar acciones desestabilizadoras en los países de nuestra región”.