Representantes de las Unidades de Batalla Bolívar Chávez (UBCH) y partidarios del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) tenían listas informales sobre los votantes para la consulta popular e iban tachando a medida que los ciudadanos ejercían su derecho al voto
La poca participación se hizo notar en la Consulta Popular Miranda 2019 el pasado domingo 1° de diciembre en la cual los mirandinos decidieron, por medio de unas elecciones, si aprobarán o no que los recursos que obtiene Polimiranda a través del cobro de multas estipulado en la Ley de Convivencia para la Seguridad y Paz Ciudadana, sean transferidos directamente a las comunas de la entidad.
“Vivo en la avenida Sanz de El Marqués y me dijeron que si no venía a votar a favor de la consulta popular me iban a quitar mi caja del CLAP. Voy a tratar de que mi voto salga nulo y digo que soy una viejita que se equivocó. No les voy a dar un ‘Sí’ a esta gente”, murmuró una señora de 78 años mientras ingresaba a la Escuela Técnica Industrial Campo Rico.
La señora, que prefirió mantenerse en el anonimato, comentó que las comunas que manejan la distribución del Comité Local de Abastecimiento y Producción (CLAP) en su zona, le dieron el mismo mensaje a todos los vecinos para obtener más votos.
“No tengo dinero para comprar comida, necesito esa bolsa y por eso estoy aquí, pero también me gustaría cerrarles la boca porque cómo es eso que uno tiene que votar obligado”, agregó la vecina de El Marqués.
En el Campamento de Pioneros, en Chacao, la cola para votar en horas de la mañana no superaba las cuatro personas. En los alrededores había diferentes representantes de las Unidades de Batalla Bolívar Chávez (UBCH) y partidarios del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) con franelas, gorras y banderas alusivas a su posición política. Además, poseían listas informales con nombres de ciudadanos, cédula y número de teléfono que tachaban a medida que las personas les confirmaban su voto.
“Votando ‘Sí’ vamos a lograr que los recursos que agarra la Alcaldía de Chacao, a través de las multas, pasen a las comunas para plantear proyectos en cada comunidad bien sea para alumbrado, seguridad o eventos sociales. Es el pueblo empoderado”, comentó Francisco Soto, miembro de la UBCH-Chacao.
Por su parte, el sector de oposición llamó a sus seguidores a abstenerse a participar en estas elecciones debido a que las consideran “inconstitucionales”. Elías Sayegh, alcalde del municipio El Hatillo, recordó que las comunas fueron rechazadas en el año 2007 con la reforma constitucional que no aprobaron los venezolanos e insistió que con esta medida no le estarían quitando recursos a las alcaldías, sino a los funcionarios de Polimiranda que tienen como “incentivo” el cobro de estas multas.
Ante la desinformación sobre el universo electoral que podía participar en estos comicios por las diferentes versiones que manejó la Gobernación de Miranda, se pudo constatar que en el municipio Chacao había jóvenes mayores de 15 años ejerciendo su derecho al voto. Sin embargo, en el municipio Sucre solo asistieron ciudadanos inscritos en el Consejo Nacional Electoral (CNE). En los municipios El Hatillo y Baruta no quisieron dar información.
Me llevaron a votar
En el municipio Zamora las cosas no fueron muy diferentes. “A mi llevaron a votar bien temprano con varios amigos míos y nos dijeron que votáramos por el sí”, explicó un jovencito de 16 años residente del sector Las Casitas, cuya identidad quedó en resguardo. “No nos explicaron nada; solo nos dijeron que fuéramos a votar y que votáramos sí”.
Mariana Sofía García/Crónica.Uno
“¿Prensa? No”
En el Liceo Gustavo Herrera, ubicado en Chacao, no permitieron el ingreso de un equipo periodístico del portal Crónica.Uno para recoger testimonios sobre el proceso electoral. Un funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) pidió una “acreditación” para poder recoger información sobre la jornada de votación y aseguró que a otro medio de comunicación también se le negó la entrada.
“Aquí no puedes hacer eso”, fue el mensaje de un miliciano a un fotógrafo que captaba la fachada del Colegio Juan Manuel Cajigal, en El Hatillo. Un miembro de mesa comentó que no había ningún problema y los guardias nacionales no ejercieron más presión para que el equipo se retirara de los alrededores.