Iveex Insaat es una empresa venezolana con sedes en Londres, Estambul y Caracas, recientemente el lÍder de la desconocida empresa fue demandado por la estafar a Pdvsa por € 124.149.321,85; según consta en oficio del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), oficio Nro. 000539 del 1° de agosto de 2019
Miguel Pérez Silva, presidente de la desconocida Iveex Insaat es uno de los nombres señalados en el desangramiento de la industria petrolera venezolana, recientemente fue demandado por la estafar a Pdvsa por € 124.149.321,85; según consta en oficio del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), oficio Nro. 000539 del 1° de agosto de 2019. Silva además fue candidato a la Asamblea Nacional Constituyente.
Pdvsa parece una empresa quebrada, a juzgar por el deterioro de sus instalaciones, la situación crítica de sus empleados, las denuncias de sus sindicalistas que posteriormente han sido perseguidos y la mediática compra de gasolina a países como Cuba. Pero, mientras tanto algunos «empresarios» se enriquecen con la fiebre del petróleo que no ha mermado en Venezuela.
«La demanda de contenido patrimonial es para ser tramitada por el Procedimiento por Intimación previsto en el artículo 640 del Código de Procedimiento Civil, en concordancia con los artículos 356 y 357 del Código de Comercio», interpuesta con solicitud de medidas cautelares nominadas e innominadas por la abogada Rocío Goitía Gómez, actuando con el carácter de apoderada judicial de la empresa Pdvsa Petróleo, S.A.
Según la sentencia contra Pérez Silva, a través de escrito del 4 de julio de 2019, Goitía Gómez, apoderada de la empresa PDVSA Petróleo, S.A., interpuso demanda “(…) a los fines de intimar el pago de facturas como consecuencia de la venta de hidrocarburos y derivados (…)”, contra la compañía Grupo Iveex Insaat y contra Miguel Silva Pérez.
El grupo dirigido por el desconocido empresario llevó a cabo una compra de hidrocarburos y derivados a la estatal venezolana Pdvsa, por lo que se emitieron seis facturas cuya sumatoria ascendió a la cantidad total de 120 millones 449 mil 321,85 euros, discriminando el equivalente en bolívares de cada una de ellas, las cuales tuvieron fechas de vencimiento comprendidas entre el 10 de abril y el 1° de mayo de 2019. Pero, nunca pagó.
En su momento, Pérez Silva alegó que las referidas facturas “(…) se encuentran aceptadas por la parte demandada de forma tácita y se desprenden de los siguientes actos concluyentes: las primeras dos facturas en virtud de la propuesta de pago enviada por la demandada a la Vicepresidencia de Comercio y Suministro de Petróleos de Venezuela, en fecha 17 de mayo de 2019 (…) en la cual se manifiesta un reconocimiento de la acreencia, en tanto que a la fecha no se ha recibido objeción alguna sobre las mismas.
De igual manera sucede con los Conocimientos de Embarque de las mercancías donde se evidencia que la sociedad mercantil Grupo Iveex Insaat recibió la mercancía (…) bajo el incorterm (sic) ‘FOB’, es decir, bajo el imperio de una cláusula de comercio internacional (…) en las que el comprador acepta la recepción del crudo y sus derivados en Buques contratados o fletados por la demandada”.