Las autoridades municipales de Pekín anunciaron una fuerte multa a una farmacia de la ciudad por haber multiplicado el precio de las mascarilla, empleadas para protegerse del brote de coronavirus
La farmacias aumentaron cinco veces el precio de venta de mascarillas, y el gobierno Chino respondió colocandoles una multa que ascendió a 3 millones de yuanes (433.000 dólares, 393.000 euros)
La Oficina de Supervisión del Mercado de Pekín explicó en su página web oficial que desde el pasado día 23 de enero ha recibido un total de 31 quejas por precios injustos de artículos de protección contra contagio.
La citada multa a uno de los establecimientos de la cadena de farmacias Beijing Jimin Kangtai.
Según el diario local Beijing News, esa farmacia estaba vendiendo cajas de diez unidades de mascarillas N95 (recomendadas para prevenir contagios) a 850 yuanes (123 dólares, 111 euros), cuando su precio en internet ronda los 143 yuanes (21 dólares, 19 euros).
Ese medio asegura que la botica multada, situada en el distrito de Fengtai (en el suroeste de la capital), hoy no abrió sus puertas.
La Oficina indicó en su comunicado que está centrando sus esfuerzos durante los últimos días en evitar que los negocios aprovechen la alta demanda de mascarillas y el miedo al coronavirus para elevar sus precios de forma desmedida.
La multa, según la normativa local, es la máxima que se puede imponer en un caso como este, y puede acarrear la suspensión de la licencia para operar del negocio implicado.
En otras provincias como Zhejiang, Shandong o Gansu se están tomando medidas para garantizar el suministro de artículos necesarios para la prevención de contagios, al tiempo que se persigue a quienes disparan excesivamente sus precios.