Las vacaciones soñadas se transformaron en un calvario para Evelin Saldaño y Adrián Tevere que están desde el pasado 16 de marzo sin poder salir del país, debido a los cierres de fronteras y a las medidas adoptadas por las naciones en su lucha contra la expansión del coronavirus.
Evelin Saldaño, de 29 años de edad, y Adrián Tevere, de 37 años, constituyen una pareja de argentinos que llegó el 4 de marzo a Venezuela, motivados por su pasión por el fútbol y seducidos ante la idea de pasar unas románticas vacaciones en las cálidas aguas del Caribe.
Un plan hermoso y que hace unas semanas había resultado ideal para la pareja de argentinos, lo que afirma Saldaño, que describe como un verdadero paraíso las playas y escenarios naturales que tuvo la oportunidad de conocer durante su recorrido por Táchira, Mérida, Falcón y Aragua.
Lastimosamente, en la memoria de estos enamorados los recuerdos alegres de la calidez del mar, el brillante sol y la euforia de los juegos deportivos van adquiriendo matices grises conforme pasan los días, para dar paso a instantes de ansiedad, nervios, angustia y miedo.
Después de que la Organización Mundial de la Salud elevó al covid-19 de epidemia a pandemia, Venezuela decretó cuarentena total y Colombia ejecutó el cierre de fronteras, Evelin y Adrián quedaron atrapados dentro del país, y fue así cómo sus vacaciones soñadas y planificadas para solo unos días pasaron a tornarse indefinidas y, sin dudas, una pesadilla.
Argentinos atrapados
El martes 3 de marzo fue el comienzo de la aventura para los novios que desde hace dos años mantienen una relación que nació en una cancha de fútbol, mientras apoyaban a su equipo favorito, el Racing Club.
Como hinchas de su equipo decidieron planificar el viaje para disfrutar de un juego de la Copa Libertadores, que enfrentaba al Racing con Estudiantes de Mérida.
Luego de evaluar las opciones económicas, decidieron viajar desde Buenos Aires hasta Cúcuta, para luego desde Colombia cruzar la frontera y disfrutar el partido realizado el pasado 5 de marzo en el Estadio Metropolitano Olímpico de Mérida, en el que el equipo de los argentinos resultó ganador, con marcador de 2 a 1.