Familiares de capitanes, tenientes y presos políticos, estos últimos trasladados sin orden judicial desde la cárcel de Ramo Verde, cumplen ocho días sin saber de ellos
La madrugada del 20 de abril, organismos de seguridad e inteligencia del Estado venezolano detuvieron a un grupo de capitanes de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), que presuntamente intentó ejecutar una sublevación para el control de las armas en comandos militares de la zona central del país. Una semana después, familiares desconocen el estado de salud y las condiciones de la detención de estos militares, recluidos en la sede de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim) en Boleíta y en comandos de Fuerte Tiuna.
Entre los detenidos está el jefe del asalto al parque de armas, capitán Dimas Omar Murillo Rubio, perteneciente a la III Promoción Batalla de Ayacucho, egresada el 9 de diciembre 2008. Murillo era el comandante de la Primera Compañía del Destacamento 441, comando de Zona 44, ubicada en Puerta Morocha, donde se presume se iniciaría la acción militar.
Betty Rubio, madre del capitán Murillo Rubio, colgó un video en las redes sociales donde en el que pide a las autoridades una fe de vida del oficial. “Mi hijo fue detenido en su puesto de trabajo, en Puerta Morocha, estado Miranda. Soy una madre desesperada. Se lo suplico, estoy angustiada. Que me hagan saber de él, que le permitan llamarme”, dijo con lágrimas en los ojos.
Por la sublevación militar están además detenidos el capitán retirado Ericsson Chaya Barrueta, arrestado en Puerto Cabello, la misma madrugada del 20 de abril; y el capitán retirado, Renny Adelso Olivares Moreno, quien fue comandante de la Primera Compañía del Destacamento 215 de la GNB.
La madre del capitán Chaya Barrueta señaló, también en un video, que no ha sabido sobre el paradero de su hijo, quien se presume esté en la sede de la Dgcim en Caracas. Lo mismo hizo Yanin Moreno, madre del capitán Renny Adelso Olivares Moreno. “Necesito saber de mi hijo. Desde que lo apresaron, no se nada de él”, manifiesta Moreno en el material audiovisual.
Allanamientos
El teniente en situación de retiro Richard Rafael Alemán Castellanos es otro de los cinco militares presos desde el pasado 20 de abril . Su hermano, Orlando Alemán, denunció además la detención ilegal de sus hermanas Yolimar y Andreina Alemán, y de su cuñado por la sublevación. “Los vinculan en sublevación y terrorismo sin tener orden judicial. Irrumpieron en mi casa y amenazaron a mis padres. Han secuestrado a mis hermanas y a mi cuñado Chaya Barrueta y actualmente desconocemos su situación de vida. Se lo aclamo en este video, mis padres están enfermos y preocupados por sus hijos. Han sido detenidos por la Dgcim”, dijo.
Leonardo Castellanos, por su parte, exigió la liberación de su hermano Manuel Castellanos, primo de las hermanos Alemán Castellanos, detenido en el allanamiento a la casa del teniente partícipe en la operación militar. “Exigimos que nos permitan comunicarnos con ellos”, dijo Castellano, quien refirió que su hermano es preparador físico y “no tiene nada que ver con el mundo militar”.
Desde Ramo Verde
La tarde del lunes 20 de abril trasladaron sin orden judicial desde la cárcel de Ramo Verde al capitán (GNB) Jesús María Alarcón Camacho; al mayor (AV) Adrián de Gouveia; a los coroneles (GNB) Pedro Javier Zambrano Hernández y José Rommel Acevedo Montañez, así como el sargento Edixon Morillo Mujica. También a un custodio y a un capitán que trabajaban en esa cárcel militar. El traslado, según los familiares, violó lo dispuesto en el artículo 125 de la Ley de Régimen Penitenciario.
Denisa Alviárez Hernández, prima del coronel Pedro Zambrano Hernández, denunció su desaparición en un video publicado en Twitter, luego de que la Dgcim se lo llevó de Ramo Verde. “Exigimos al régimen de Maduro fe de vida del coronel, porque no hemos escuchado su voz en una semana, por lo que tememos por su vida”.
Mayra Alarcón, hermana del capitán Jesús María Alarcón, detenido desde noviembre de 2015 por su participación en el plan denominado Golpe Fénix, señaló que no saben del paradero de su hermano, porque no han podido verlo desde el pasado lunes.