La Legislatura de Michigan, dominada por republicanos, aprobó el martes finalmente un polémico proyecto de ley de reforma laboral llamado «derecho al trabajo» que limita el poder de los sindicatos, un revés devastador y otrora impensable en una estado considerado cuba del movimiento sindical.
La medida fue enviada al gobernador republicano Rick Snyder para su promulgación. Snyder dijo que podría hacerlo el miércoles.
La Cámara de Representantes estatal aprobó dos proyectos de ley que ya habían sido aprobados por el Senado. Uno de ellos se refiere a los empleados públicos y el otro a los del sector privado. Ambas cámaras aprobaron la versión del sector privado la semana pasada.
Michigan será el 24to estado del país con una legislación de «derecho al trabajo», que elimina el requisito de que los trabajadores no agremiados paguen cuotas sindicales por la negociación de contratos y otros servicios.
Los demócratas se opusieron con denuedo a su aprobación, y los sindicalistas organizaron numerosas protestas dentro y fuera del Capitolio con asistencia de miles de afiliados.