La Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea) denuncia que algunos comerciantes han informado que se les exige vender todos los 27 productos básicos según la lista de precios regulados por el gobierno del presidente Nicolás Maduro, incluso en el caso de las marcas de aquellas empresas que no participaron en los acuerdos, entre ellas Alimentos Polar. En algunos casos, se les ha conminado específicamente a no comprar productos de esta compañía.
“Exigirle al comercio que venda los productos a precios que no han sido acordados con las empresas manufactureras, conlleva el severo riesgo de generar desabastecimiento, escasez, y la inviabilidad económica de muchas empresas, que tendrán impacto en la población venezolana”, advierte Cavidea en un comunicado.
En abril, el gobierno del presidemye Nicolás Maduro anunció que retomaría la política de control de precios con la regulación de 27 productos básicos de la canasta alimentaria, entre ellos el kilo de harina de maíz precocida. Luego el Ministerio de Comercio Nacional, Sunagro y la Sundde desplegaron a más de 1.000 fiscales a obligar a supermercados, abastos y mercados municipales a cumplir con la lista de precios que no fue publicada en Gaceta Oficial.
Economistas y los gremios empresariales Fedecámaras, Conindustria y Consecomercio advierten que el control de precios ha demostrado que solo genera escasez y fortalecimiento del mercado negro de productos de primera necesidad, como sucedió en agosto de 2018 cuando el gobierno impuso precios de 25 rubros alimenticios que a las pocas semanas desaparecieron de los anaqueles.
Adán Celis Michelena, presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), sostiene que la orden dada por funcionarios del gobierno a los comercios de no comprar productos Polar es una medida unilateral y arbitraria tomada como represalia porque la compañía decidió no acordar precios, considerando que esto pondría en riesgo su capacidad para producir y abastecer el mercado.