El juez James E. Boasberg, del Tribunal del Distrito de Columbia, ordenó decomisar la carga de cuatro buques presuntamente involucrados en cargamento barco a barco en alta mar, para traer combustible a Caracas
Un tribunal estadounidense ordenó decomisar la carga de cuatro buques por presuntamente estar involucrados en transferencias de cargamento barco a barco para, de manera encubierta, llevar gasolina iraní a Venezuela, destacó un despacho de la agencia Reuters.
Las embarcaciones involucradas son Bella, Bering, Pandi y Luna. “Los documentos alegan un esquema que involucra a múltiples partes afiliadas a la Guardia Revolucionaria Islámica para enviar encubiertamente combustible iraní, obtenido mediante transferencias de barco a barco, a Venezuela”, señaló el Departamento de Justicia estadounidense.
La demanda alega que esos envíos son una fuente de influencia de los Guardianes de la Revolución, razón por la cual el decomiso se enmarca en estatutos antiterroristas.
El Departamento de Justicia detalló que el Bella transporta 302.502 barriles de gasolina, el Bering, 302.522, el Luna, 259.700 y el Pandi, 298.484.
La orden fue emitida por James E. Boasberg, juez del Tribunal del Distrito de Columbia. La demanda se oficializó gracias a una investigación ejecutada por el FBI.
Cabe destacar que, apenas el miércoles, se efectuó la subasta de al menos 100.000 barriles de gasolina propiedad del empresario Wilmer Ruperti, luego de que una compañía naviera denunció que había elementos de sospecha de que el combustible sería destinado a Venezuela, a través de un entramado de trasferencias de carga barco a barco.
La compañía, identificada como Brujo Finance Company, que tiene su sede en las Islas Marshall, temía que el acuerdo pudiera exponerla a sanciones estadounidenses. El caso muestra cómo algunas compañías marítimas prefieren enfrentar a clientes en la corte que el riesgo de que sus buques sean sancionados.
En una demanda presentada en mayo ante el Tribunal de Distrito Sur de Texas en Estados Unidos, Brujo dijo que su buque, Alkimos, cargó gasolina en Panamá en marzo y el fletador, Sea Energy Company, dijo que era un viaje a Aruba o Curazao.
Brujo dijo que Sea Energy informó que Alkimos debía descargar a través del mecanismo de transferencia barco a barco en Aruba a Beauty One, un petrolero que atracaba con frecuencia en Venezuela. Brujo agregó que pidió garantías a Sea Energy de que la gasolina no iría al país sudamericano, pero no recibió una respuesta satisfactoria.
Estados Unidos impuso más sanciones a la empresa Petróleos de Venezuela en enero de 2019, en un esfuerzo por propiciar la salida del presidente Nicolás Maduro, y ha impuesto medidas a navieras que transporten crudo venezolano y ha advertido de sanciones contra otras empresas que hacen negocios con Venezuela.
Brujo invocó la cláusula de sanciones de su contrato y llevó a Sea Energy a un arbitraje, allanando el camino para la subasta. Brujo busca resarcir los daños y perjuicios por los honorarios en que incurrieron con Alkimos mientras esperaban.
Sea Energy y ES Euroshipping -el dueño de la carga- acusó a Brujo de “robo” y dijo que la operación no presentaba riesgos porque el buque Beauty One no fue sancionado. “Ninguna ley aplicable impone un embargo completo contra Venezuela”, escribieron las compañías.
ES Euroshipping es propiedad de Wilmer Ruperti, empresario venezolano que coordinó un envío de gasolina a Venezuela en abril pasado y Washington lo investiga por posibles violaciones de las sanciones.
RECUADRO
Levantan sanciones
Estados Unidos levantó el jueves las sanciones contra Delos Voyager Shipping Ltd, con sede en las Islas Marshall, y Romina Maritime Co Inc, en Grecia, a las cuales se le impusieron las medidas el mes pasado tras las acusaciones de estar involucradas en el comercio de petróleo venezolano.
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos también levantó sanciones contra otras cuatro compañías, incluidas Adamant Maritime Ltd y Sanibel Shiptrade Ltd, ambas también de las Islas Marshall, así como a cuatro tanqueros.
La decisión anunciada el jueves eliminó a las restantes empresas griegas incluidas en junio en la lista negra de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) de Estados Unidos por transportar petróleo venezolano.
“El objetivo principal para la imposición de sanciones bajo las diversas autoridades de la OFAC es promover el cambio de comportamiento”, dijo un portavoz. “Las entidades y los buques que se retiraron de la lista hoy demostraron de manera creíble que han dejado de participar en actividades sancionables”.