Residentes de la carretera Petare-Santa Lucía, en el municipio Sucre del estado Miranda, denuncian que la delincuencia se ha apoderado de la zona, por lo que hacen un llamado a las autoridades policiales para que implementen operativos de seguridad.
Señalaron que alrededor de 30 kilómetros de esa vialidad están a la buena de Dios, en completo abandono sin puntos de control, ni seguridad policial ni patrullaje.
Algunos vecinos denunciaron que han sido víctimas de robo hasta en tres oportunidades o más en el sector La Lagunita. Contaron que, en horas de la madrugada, se atraviesan sujetos armados en la vía y abordan los autobuses del transporte público, los secuestran, los llevan a un paraje solitario y roban a todos los pasajeros.
Los delincuentes aprovechan los tres reductores de velocidad que existen en la zona para abordar las unidades que transitan por allí para pararlas y robarlas.
Los vecinos reportaron que el pasado 24 de agosto un conductor y un colector de la organización Línea Miranda fueron secuestrados con el vehículo marca Encava año 2014 mientras cubrían la ruta y aparecieron al día siguiente; la unidad fue encontrada en Caracas dos días después del robo.
Afirman que esa carretera está a merced de la inseguridad. A diario ocurren robos de carros, autobuses, motos, delitos que han sido denunciados en la Policía Municipal de Sucre, pero no han obtenido respuestas. La comunidad exhorta a las autoridades a instalar puntos de control para contar con vigilancia permanente.
Además de la situación económica que atraviesan, la inseguridad y el confinamiento por la pandemia, los residentes de la carretera Petare-Santa Lucía sufren de escasez de agua. En reiteradas oportunidades han cerrado la vía en reclamo del restablecimiento de ese servicio básico.
