Emilio Materán
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La suerte está echada y finalmente solo quedan dos candidatos de ocho que originalmente iniciaron la ruta por obtener la Dirección General de la Organización Mundial de Comercio (OMC), en esta tercera y última fase de la rigurosa selección para designar al sucesor de Roberto Azevêdo.
Yoo Myung-hee, representante de Corea del Sur y Ngozi Okonjo-Iweala, por Nigeria, quien por cierto tiene doble nacionalidad (americana y nigeriana) son las dos mujeres que han pasado todos los filtros necesarios para acumular la preferencia de la mayoría de los miembros del Consejo General de la OMC, quienes junto a los presidentes del Órgano de Solución de Diferencias y del Órgano de Examen de las Políticas Comerciales, consultaron con todos sus miembros para llegar de ocho aspirantes a sólo dos.
Si bien ambas candidatas tienen un peso importante en esta aspiración, estamos convencidos que la selección como nueva directora general debe recaer sobre Yoo Myung-hee, ya que ésta cuenta con una basta experiencia en negociaciones bilaterales y acuerdos de libre comercio, lo cual es fundamental en el desarrollo del importante cargo que se disputa.
Yoo Myung-hee, es la primera mujer que ejerce el cargo de Ministro de Comercio de Corea del Sur y desde ese puesto ha demostrado ser una persona innovadora, estratega y negociadora, con más de 25 años de experiencia, elementos necesarios para sobrepasar los obstáculos y los grandes desafíos que la pandemia del covid-19 han dejado en el mundo del comercio.
Además, ella, desde su cargo actual, ha trabajado con una infinidad de países con los cuáles ha desarrollado soluciones ganar-ganar, lo cual genera simpatías y apoyos en todos los niveles de desarrollo del comercio.
De esta forma, solo queda esperar escasos días para que finalmente, luego de tres rigurosas fases, se elija la persona más idónea que logre acuerdos multilaterales que relancen el comercio a nivel mundial, algo sumamente importante luego de los efectos negativos causados por una pandemia que todavía no llega a su final.
