La víctima habría sido engañada con trabajar en Caracas como vendedora de ropa devengando 1.500 dólares mensuales
El Ministerio Público acusó a Judith Chundio (30), por su presunta responsabilidad en la trata de una adolescente peruana de 17 años de edad, quien habría sido traída ilegalmente a Venezuela desde Ecuador el 2 de abril de 2011, específicamente a la parroquia Candelaria del municipio Libertador, Distrito Capital.
El fiscal 90° auxiliar del área metropolitana de Caracas, Felipe Hernández, acusó a la mujer por la presunta comisión del delito de trata de personas, previsto y sancionado en el artículo 56 de la Ley Orgánica Sobre el Derecho de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en concordancia con tratados y convenios internacionales relacionados con la materia, entre los que se destaca el Protocolo de las Naciones Unidas para Prevenir, Reprimir y Sancionar la Trata de Personas, especialmente Mujeres y Niños.
Dicho artículo establece que “Quien promueva, favorezca, facilite o ejecute la captación, transporte, la acogida o la recepción de mujeres, niñas o adolescentes, mediante violencias, amenazas, engaño, rapto, coacción u otro medio fraudulento, con fines de explotación sexual, prostitución, trabajos forzados, esclavitud, adopción irregular o extracción de órganos, será sancionado con prisión de quince a veinte años”.
En el escrito presentado ante el Tribunal 4° de Control de la referida jurisdicción, el fiscal solicitó la admisión de la acusación, el pase a juicio de la mujer y que se mantenga la medida privativa de libertad contra la mujer, quien se encuentra recluida en el Instituto Nacional de Orientación Femenina.
De acuerdo con la investigación, Chundio habría coordinado el traslado vía terrestre de la adolescente desde Ecuador hasta Venezuela sólo con un permiso de viaje y sin pasaporte.
La mujer le habría prometido a la joven que trabajaría en Caracas como vendedora de ropa devengando 1.500 dólares mensuales.
Una vez que llegó al país, Chundio al parecer encerró a la adolescente en su apartamento ubicado en la parroquia Candelaria, donde la tenía realizando labores domésticas en horario forzado y vigilada con cámaras de seguridad.
En una oportunidad, la mujer envió a la joven a realizar algunas compras y en el comercio encontró a otra persona de nacionalidad ecuatoriana a quien le pidió que llamara por teléfono a su progenitora a fin de que le informara la situación en la que se encontraba.
Una vez presentada la denuncia, la mujer fue aprehendida por funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, el pasado 23 de octubre en el sector La Hoyada del municipio Libertador.
Prensa Ministerio Público