Las emergencias por accidentes de tránsito, riñas y quemaduras por fuegos artificiales solo contarán con la atención de residentes pues la escasez de insumos y medicinas que se ubica en un 95 por ciento, obligará a familiares a comprar desde el alcohol hasta los medicamentos.
René Rivas, titular de Colegio de Médico de Lara, estima que familiares seguirán corriendo a comprar insumos en esta temporada navideña, ante el alto índice de déficit y que incluye la realización de exámenes y rayos X en privado, porque solo realizan exámenes sencillos de laboratorio.
La sala de emergencias del principal hospital de Lara, el cual recibe pacientes de estados como Portuguesa y Yaracuy, cada año se ve congestionada para la temporada decembrina, pues para esa fecha se incrementan los heridos por riña, los lesionados por accidentes de tránsito y los quemados por fuegos artificiales, de allí la preocupación del gremio médico que no haya recursos para atender la demanda.
“Prácticamente solo se ofrece el recurso humano, suficiente con 4 residentes por guardia, pero de un 80 por ciento sin enfermeras”, explica Rivas, quien agrega que solo se tiene la seguridad de estos profesionales por los postgrados de cirugía plástica y reconstructiva para quemaduras. Los casos que ameriten de cuidados intensivos, será difícil conseguir cupo porque apenas están funcionando cuatro camas de UCI.
Las esperanzas se centran en que disminuyan los casos de quemaduras por fuegos artificiales ante el alto costo de los mismos, esos que han comprometido extremidades de niños y adultos por la inadecuada manipulación. Pero es probable que los heridos por traumatismo en accidentes de tránsito puedan ameritar tomografías, cuyos precios puedan superar los 100 dólares en centros privados y hasta los tornillos, deban ubicarlos en casas comerciales.