Con información de El Tiempo, esta joven cartagenera fue dada por muerta y enfrentó una verdadera pesadilla para que las entidades gubernamentales reconocieran de nuevo su identidad y que está viva.
“Me percaté de la situación el 27 de noviembre del año pasado. Recibí atención médica de Coosalud, vía telefónica, pero cuando fui a reclamar los medicamentos me enteré que estaba muerta”, dice María Estela Luna, habitante del popular barrio Olaya Herrera.
De inmediato, María se dirigió a su EPS, donde le confirmaron que -según el Hospital Universitario del Caribe- su deceso se había presentado el 21 de octubre, y por lo tanto ya no estaba afiliada.
«Me dijeron que esto es un problema del estado y me mandaron para la Registraduría, pero cuando llego allá me dan la noticia de que mi cédula había sido dada de baja el 3 de noviembre del 2020 por fallecimiento», relata María Estela.
La mujer de 39 años sufre de una artrosis prematura que la obliga a tomar medicamentos especiales y terapias que cumple ya cuatro meses sin realizar.
Su registro de defunción daba cuenta de que había muerto el 31 de octubre en el Hospital Universitario del Caribe.
“Me dijeron que había muerto de covid-19 el 31 de octubre”
«Cuando llego allá desesperada y busco la historia médica donde me dicen que había ingresado al hospital el 31 de agosto con un cuadro de covid- 19 y había muerto el 31 de octubre», añade con un sentimiento de rabia, tristeza e indignación.
Caminó por las calles de Cartagena triste y confundida, y relata que el pasado diciembre fue el mes más confuso de su joven vida.
Lo que siguió para esta mujer fue un verdadero viacrucis para demostrarles a las autoridades y entidades de la salud que ella estaba viva.
“Familias en Acción y otras ayudas que recibía por la pandemia me fueron suspendidas, pero lo que más me preocupaba era quedarme sin atención de salud”, agrega esta cartagenera.
Para ‘volver a nacer’ inició una larga tramitología que le dejó dolores de cabeza y muchos gastos, pero también una respuesta clara sobre el momento cuando la sociedad la había matado, si ella seguía vivita y respirando.
La respuesta dormía con ella desde hace 20 años
María Estela termino descubriendo que el origen de su situación estaba con ella y dormían juntos desde hace 20 años ¡Su marido le había prestado la cédula a una ciudadana venezolana!
EL TIEMPO consultó con Coosalud esta historia y aseguran que «el acta de defunción de María Estela Luna fue expedida por el Hospital Universitario de Cartagena (HUC) después de una atención realizada a una mujer que se identificó con la cédula de esta usuaria».
La suplantación se dio el 31 de agosto de 2020 y el fallecimiento se dio el 31 de octubre de 2020, señala Coosalud.
Según el Hospital Universitario del Caribe, tras los reclamos desesperados de esta cartagenera lograron detectar que el nombre verdadero de la persona fallecida era Milagros del Carmen Márquez, quien en vida habría suplantado a María Estela Luna para acceder al servicio.
“… pero cuando llego allá me dan la noticia de que mi cédula ha sido dada de baja el 3 de noviembre del año pasado por fallecimiento”.
El HUC y Coosalud aseguran que la suplantación fue facilitada por el mismo esposo de María Estela Luna, quien confesó el hecho y sostuvo que Milagros del Carmen Márquez era venezolana y no tenía acceso a servicios de salud, razón por la cual “le hicieron el favor” de prestarle la cédula con el fin de que pudiera ser atendida.
Después de tocar las puertas y de solicitar media docena de cartas y certificaciones, finalmente la Registraduría del Estado Civil le devolvió su identidad a María Estela Luna esta semana. Pero la tramitología sigue ahora para recuperar sus servicios de salud.
«El HUC explica que, después de confirmar el hallazgo, realizó el acta de defunción de la señora Milagros con la información veraz que lograron obtener acerca de ella. Sin embargo, no se realizó la anulación del acta de defunción realizada sobre la persona suplantada, es decir, nuestra usuaria María Estela Luna. En ese sentido, aseguran que esta omisión en el procedimiento se encuentra en proceso de investigación», señala Coosalud.
Fuente: El Tiempo