Una comisión del Conas de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) detuvo al abogado Jesús Silva, sobre quien recae una orden de aprehensión por un Tribunal de Control, a solicitud del Ministerio Público, luego de violar las órdenes de protección correspondientes a su exesposa, Claritza Ron.De acuerdo con reportes policiales, Silva fue seguido por comisiones de ese cuerpo de seguridad, tras la orden solicitada por el Fiscal General, Tarek Wiliam Saab, quien ordenó su detención tras los hechos ocurridos la tarde del lunes 15 de marzo en el Tribunal Cuarto de Control del Circuito Judicial Penal de Los Teques, estado Miranda.
Como se recordará, los escoltas del abogado chavista Jesús Silva habrían atacado a Ron en las escaleras del tribunal donde se había diferido, por segunda vez la audiencia preliminar de las demandas que la ciudadana adelanta contra Silva por violencia de género.
Ese mismo día Silva inició una campaña de descrédito contra su exmujer, quien lo había denunciado por nueve tipos de violencia contemplados en la Ley Orgánica sobre el Derecho de la Mujer a una Vida Libre de Violencia, luego de una agresión sufrida en el mes de febrero de 2019: Silva le propinó múltiples golpes y le fracturó una mano.
Desde ese instante, la Sra Ron ha enfrentado múltiples trabas burocráticas para continuar el proceso judicial contra el abogado ligado al gobierno.En entrevista publicada durante 2020, Ron señaló que las agresiones diarias de Silva venían acompañadas de insultos, con adjetivos como “parásito y cucaracha”.
En el año 2012, Ron interpuso una denuncia por violencia de género en el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en Maracay, estado Aragua, donde residía con Silva, pero su exesposo logró que se engavetara el caso. Luego de esa denuncia la agraviada reveló que le dio la peor golpiza en los nueve años de convivencia.
“Mis hijos también fueron víctimas de él; todas las agresiones las hizo frente a ellos. Cuando me fracturó la mano yo tenía a mi hijo de solo cuatro meses en brazos y mi otro hijo abrazado a mi cintura gritando y llorando”, refirió Claritza con la fuerza que ha tomado durante este año de terapias y con ayuda de familiares.
El 9 de febrero de 2019, el abogado le propinó una golpiza que la víctima califica de salvaje: sufrió una triple fractura de la mano izquierda y una severa lesión en la espalda.
Para Ron no ha sido fácil seguir adelante después de la separación. Detalla que ha pasado dos años en esta lucha que ha sido cuesta arriba, un proceso burocrático en la prosecución de la denuncia.«Vas al Ministerio Público y te dicen que debes tener paciencia”, relató mientras comentaba