Un hombre de 21 años fue imputado de asesinato por el tiroteo el lunes en un supermercado en Boulder, en el estado de Colorado, en el que murieron 10 personas, incluyendo un policía, anunció el martes la policía local.
Identificado como Ahmad Alissa, según una transcripción fonética de su nombre, citado durante una conferencia de prensa, el atacante está hospitalizado tras ser herido en una pierna. Su condición es “estable” y debe ser pronto trasladado a prisión, declaró la jefa de la policía de Boulder, Maris Herold.
De acuerdo a medios locales Alissa es residente de la localidad de Arvada, en la misma localidad y estudia Ciencias de la Computación en la Universidad Metropolitana de Denver. En su perfil de Facebook señala que estudió en Arvada West High School.
La Policía dijo en conferencia de prensa que “ha vivido la mayoría de su vida en Estados Unidos”, y es un aficionado a a la lucha libre.
En el pasado, Colorado ha sido escenario de dos de los más sonados tiroteos masivos del país. En el ocurrido el lunes, hay un policía entre los fallecidos han informaron las autoridades.
El atacante se encuentra bajo custodia y está herido, afirmó Michael Dougherty, fiscal del distrito del condado de Boulder, ubicado unos 50 kilómetros al noroeste de Denver, la capital de Colorado.
Testigos en el supermercado King Soopers dijeron que inicialmente escucharon múltiples disparos afuera de la tienda.
Nevin Sloan, que por poco escapó con su esposa Quinlan, describió el pánico en aumento a medida que las detonaciones se acercaban y los presentes decidían si quedarse quietos o intentar escapar.
“De pronto empezamos a escuchar ‘bang, bang, bang’ y corrí hacia ella [su esposa] y le dije ‘ey, necesitamos salir de aquí”, narró a CBS, señalando que ayudaron a otros escapar por una salida de emergencia.
Ryan Borowski escuchó al menos ocho tiros en el supermercado. “Casi me matan por ir a comprar un refresco y una bolsa de patatas”, contó a CNN. “Siento que ya no hay lugares seguros”.
La jefa de la policía local, Maris Herold, dijo que 10 personas murieron, incluyendo el “heroico” agente de policía Eric Talley, de 51 años, que fue el primero en responder a la urgencia.
“No me sorprendió que él fuese el primero en llegar”, dijo su padre Homer Talley a la cadena local KUSA, indicando que su hijo “amaba su familia más que nada”.
Imágenes difundidas en directo durante la operación habían mostrado a un hombre vestido únicamente con un pantalón corto deportivo y manchado de sangre siendo escoltado por los agentes fuera de la tienda.
Un sospechoso detenido es la única persona con “heridas serias en este punto”, dijo el comandante de la policía Kerry Yamaguchi, que tampoco quiso confirmar si el hombre del video era el atacante ni cuál sería su motivación.
Según los medios estadounidenses, el hombre estaba armado con un fusil de asalto AR-15, un arma con frecuencia usada en los tiroteos.
“La muy compleja investigación” tomará al menos cinco días en completarse, estimó Herold.
La policía arribó al lugar “solo unos minutos” después de haber sido alertado de la presencia de un hombre con un rifle en el estacionamiento del supermercado y “muy rápidamente” entraron al local donde estaba atrincherado, según Yamaguchi.
Imágenes sin verificar emitidas previamente en directo por un testigo mostraron al menos tres personas tendidas boca abajo en el suelo tanto dentro como fuera de la tienda, antes de que se escucharan múltiples disparos.
Decenas de vehículos blindados, ambulancias y personal armado, incluyendo agentes del FBI y del SWAT, se desplegaron en el lugar.
Una media docena de policías armados con fusiles de asalto se subieron al techo de la tienda con la ayuda de un camión de bomberos que desplegó su escalera.
“Las acciones de los agentes de policía fueron heroicas”, valoró Herold.
“Nuestros corazones están rotos por este acto de violencia sin sentido”, afirmó la portavoz de King Soopers, Kelli McGannon, que elogió también a los “trabajadores de emergencia que respondieron de forma tan valiente a estos actos de violencia”.
El gobernador de Colorado, Jared Polis, calificó el suceso de “tragedia sin sentido”.
Este tiroteo ocurre días después de que EE UU se viera sacudido por otro ataque a varios salones de masaje asiáticos en el estado de Georgia (sureste), que dejaron ocho muertos.
Colorado, de su lado, ya fue escenario de dos de los tiroteos masivos más graves de la historia de Estados Unidos.
En 1999, dos adolescentes mataron a 12 compañeros y un profesor en la escuela secundaria de Columbine antes de suicidarse.
Después, en 2012, un hombre fuertemente armado irrumpió en un cine que proyectaba una película de Batman en Aurora, Colorado, matando a 12 personas. El agresor cumple ahora una pena a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, afirmó el que quería que el Congreso aprobara leyes que requieran verificaciones de antecedentes para todas las ventas de armas y que prohíban las de asalto y de alta capacidad en tiendas.
“Esta administración no esperará al próximo tiroteo masivo para atender esa llamada”, aseguró el mandatario.
El líder del Senado, el demócrata Chuck Schumer, afirmó que la Cámara Alta “debe avanzar y lo hará en la legislación para ayudar a controlar la epidemia y la violencia con armas”.
Este lunes, el senador de Colorado Michael Bennet, demócrata, urgió a los estadounidenses “a revisitar una conversación nacional sobre la violencia con armas que no se reduzca a lo partidario”.