Tania Ramírez, afrodescendiente, fue agredida con brutalidad a la salida de un local bailable en Montevideo, Uruguay, por cinco mujeres que la golpearon mientras le propinaban insultos racistas
MONTEVIDEO. El ataque a una mujer afrodescendiente a la salida de un local bailable de Montevideo desató el lunes una ola de muestras de repudio e indignación por parte de los uruguayos, en un caso que alerta sobre la existencia de racismo en el país.
Tania Ramírez, de 27 años, fue agredida con brutalidad a la salida de un local bailable el fin de semana por cinco mujeres que la golpearon mientras le propinaban insultos racistas.
La joven -estudiante de relaciones internacionales, Dj y ex vedette de una comparsa de carnaval- sufrió lesiones en el abdomen que la llevaron a su internación en un centro de salud.
La reacción a través de las redes sociales fue inmediata: condenaron el hecho, mientras que el colectivo Mizangas Mujeres Afrodescendientes convocaron a una concentración para el miércoles «para defender el derecho a la equidad racial y a la sana convivencia, representando a una sociedad que se niega a caer en las garras de la violencia irracional», señala la convocatoria a la marcha bajo el lema «Uruguay contra la violencia racista».
A su vez, el gobierno reaccionó convocando a una «reunión urgente de la Comisión Honoraria contra el racismo, la xenofobia y toda forma de discriminación para analizar las medidas a tomar».
Según un comunicado difundido este lunes, el «Ministerio de Educación y Cultura (MEC) expresa a la ciudadanía su más firme rechazo y condena al ataque dirigido hacia una mujer por su condición de afrodescendiente durante el pasado fin de semana».
Según el último censo nacional, en Uruguay el 8% de la población cree ser afrodescendiente.
El ataque a una mujer afrodescendiente a la salida de un local bailable de Montevideo desató el lunes una ola de muestras de repudio e indignación por parte de los uruguayos, en un caso que alerta sobre la existencia de racismo en el país.
AFP