Los miembros de la OPEP+ decidieron este martes mantener el ritmo del aumento de su producción de crudo para julio, sin dar indicaciones sobre los meses siguientes ni abordar el regreso del petróleo iraní al mercado.
La organización «confirmó la decisión adoptada» durante la precedente cumbre sobre los «ajustes de la producción para el mes de julio, teniendo en cuenta los fundamentos del mercado observados», dijo el cartel en un comunicado tras una corta reunión de ministros.
La estrategia actual consiste en un aumento progresivo entre mayo y julio que suma casi 1,2 millones de barriles por día, al que se añade un millón de barriles retirado de forma voluntaria por Riad a principios de año.
La OPEP+, una alianza sellada a finales de 2016 entre los 13 Estados de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderados por Arabia Saudí, y 10 aliados, entre ellos Rusia, celebró una primera reunión del comité de seguimiento mensual del actual acuerdo de reducción de producción del grupo (JMMC) y después llevó a cabo una breve cumbre ministerial.
«Nubes en el horizonte» Los 23 miembros renuncian voluntariamente a producir más para no inundar un mercado debilitado por la crisis sanitaria.
Pero como los precios vuelven a los niveles de principios de 2020 y la demanda se fortalece, sobre todo en Europa y Estados Unidos, tenían la posibilidad de reabrir los grifos.
El cártel mantuvo sus previsiones a principios de mes y espera un repunte de seis millones de barriles diarios este año con relación a 2020, hasta los 96,5 millones consumidos a diario en el planeta.
«La demanda mejoró en varios grandes mercados mundiales, como Estados Unidos y China», los dos primeros consumidores de petróleo, explicó el ministro saudí de Energía y líder de la alianza, Abdelaziz bin Salmán, antes de la cumbre.
El hermanastro del poderoso príncipe heredero Mohamed bin Salmán también se congratuló por las campañas de vacunación anticovid y la reducción de las reservas de crudo en el mundo, aunque también alertó que había «nubes en el horizonte».
«Estamos convencidos de que la economía mundial está en vías de recuperación y que la situación se normaliza», abundó el vice primer ministro ruso, Alexander Novak, a cargo de la Energía.
Sin comentarios de Irán Tras la decisión del grupo, el optimismo se apoderó del mercado y hacia las 14H40 GMT el barril de Brent del Mar del Norte para entrega en agosto y el WTI para julio ganaban alrededor de un 3%.
Las tensiones entre Rusia y Arabia Saudí, mencionadas por varios observadores antes de la reunión y que han empañado encuentros anteriores, no tuvieron lugar finalmente el martes.
El regreso probable de la producción iraní tampoco fue abordado en la reunión, indicó el ministro saudí en una rueda de prensa tras la cumbre. Y eso pese a la importancia de su volumen, en el cartel y en el mercado.
La República Islámica ha entablado negociaciones indirectas con Estados Unidos en Viena, gracias a la mediación de los países europeos, para resucitar un acuerdo sobre su programa nuclear.
Si las negociaciones tienen éxito, el levantamiento de algunas sanciones económicas, como el embargo sobre el petróleo en vigor desde 2018, despejaría el camino para un aumento considerable de la producción iraní.
El ministro iraní del Petróleo, Bijan Namdar Zanganeh, citado por Shana, la agencia oficial de su ministerio, calificó el lunes de «prioridad» el hecho de casi triplicar la producción del país.
Con información de AFP.