Es difícil encontrar a alguien que no considere la pandemia de covid-19 la peor crisis mundial desde la desastrosa Segunda Guerra Mundial.
Mientras algunos países sufren las peores consecuencias (China, España, Italia y Estados Unidos), otros han puesto en marcha estrategias que han logrado ralentizar la expansión del nuevo coronavirus.
Y las estrategias son variadas: van desde la masificación de las pruebas del virus al aislamiento social extremo, las cuarentenas localizadas e incluso el monitoreo de la población más vulnerable.
Se han realizado varias notas sobre estos «casos de éxito», y, alerta de spoiler: todas coinciden en una cosa, apuestan por hacer análisis en masa y no solo a los enfermos de gravedad.
A pesar de ser el quinto país con mayor número de contagios en el mundo por el covid-19, Alemania tiene el número de víctimas fatales del virus más reducido que el de otros países que han reportado números de contagiados similares, como España, Italia o Reino Unido.