La cultura siempre está presente en una organización inclusive si está no es bien gestionada. Podemos decir que la cultura de una organización suele ser fuerte y dominante. La razón de ello radica en que de alguna forma se integra y sobrepasa a la cultura de los individuos para que finalmente los miembros de la empresa integren esas características de la cultura organizacional a su propia cultura.
Si llevamos estos parámetros al área de Seguridad, podríamos decir que el objetivo primordial, busca que todos los integrantes de una organización, más allá de sus áreas, integren y acepten un modelo cultural orientado sobre una adecuada conducta segura en la gestión de riesgo.
Considero que vale la siguiente aclaración, porque al momento de referirnos a la industria de la seguridad el responsable de Seguridad debe promover un cambio cultural y un cambio de hábitos para desarrollar mejores conductas seguras en la empresa privada como tal, donde sus principales exponentes pueden ser las empresas de seguridad o consultoras, poseer una adecuada cultura de seguridad interna no representa mayores obstáculos para ese modelo de organizaciones.
Seguramente nos encontramos frente una organización que al brindar servicios de seguridad sus colaboradores estén especializados en su actividad pero esta situación tan favorable puede que no sea igualmente representativa dentro de corporaciones, donde su negocio no tenga relación con brindar servicios de seguridad.
Toda organización es parte del entramado social, y la empresa sólo es uno de los tantos escenarios donde las personas interactúan. Es un espacio donde se conjuga la cultura personal, la cultura organizacional y en este caso podría tratarse de una propuesta de cambio de hábitos para desarrollar mejores conductas seguras.
El responsable de Seguridad debe tener claro que todos estos parámetros están presentes al momento de promover un cambio cultural desde el área. No se trata de una serie de seminarios internos, si lo que busca es realmente construir un modelo diferente en las conductas de la organización, se debe abordar con conocimiento y una estrategia adecuada.
Ante todo proceso nuevo que se quiera implementar cabe recordar que siempre debe estar orientado a las personas. Una vez que la nueva cultura comience a ser construida y aceptada, poco a poco pasará a formar parte de la cultura organizacional. Tal vez este ejemplo de no cumplimiento podría ser revelador de lo que no queremos.
Imagine una empresa que tenga fuertes políticas de seguridad y control, pero que nadie sigue ni considera importante y que por ello tampoco existen consecuencias. En casos como éstos, posiblemente estemos frente a un posible plan de crear una adecuada cultura de seguridad que nunca llegó a concretarse.
De acuerdo con la industria a la que pertenezca determinada organización, también contará con una estructura interna construida por diversas áreas y el área de seguridad será sólo una más, no menos importante, pero en la justa medida tampoco más relevantes que otras.
Aunque en ocasiones por la pasión de la profesión, quisiéramos que todo se direccionara en ese sentido. Por ello es importante evitar valorizar la actividad de una forma equivocada en relación con las otras áreas de la organización.
Es en este escenario donde los profesionales de seguridad tienen grandes desafíos.Sólo recuerde que inclusive si posee la certeza de que cuenta con el mejor plan en gestión de riesgos, será necesario saber comunicarlo, y en ocasiones, el proceso de aceptación, implementación, y compromiso de las otras áreas llevará tiempo.
Para asesorías o consultorías se puede comunicar conmigo al teléfono 04127241188
Adolfo Gelder
T.me/seguridadintegral
@adogel