El experto en Seguridad Alimentaria, Edison Arciniega, dijo que “las tendencias alimentarias del país dicen que, entre los años 2022 y 2023, Venezuela debe estar saliendo de la crisis humanitaria y económica de la que padece”
Ariana Bello / Andry Colmenares
“En este momento el estado Miranda tiene desactivada sus actividades productivas a causa de dos grandes fenómenos: la delincuencia y la carencia de insumos. No es rentable producir, ni movilizar las cargas ya que Miranda es un estado profundamente peligroso, y esta violencia lo que causa es que aumente la vulnerabilidad alimentaria”. Así se expresó el director ejecutivo de la Organización No Gubernamental (ONG), Ciudadanía en Acción y experto en Seguridad Alimentaria, Edison Arciniega, durante el programa Conversando con Emilio, conducido por el periodista Emilio Materán y que es trasmitido por YouTube, Instagram y Facebook Live.
Asimismo, continuó el experto en seguridad alimentaria, “los programas que existen actualmente son, el Plan de Atención Nutricional, que contiene el sistema de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), el cual abarca a un 78 % de la población. También están los programas que desarrollan los gobiernos regionales y locales, que tienen una política de situación humanitaria deplorable para los ciudadanos, puesto que, la ayuda estadal se ha visto comprometida en los últimos años”.
“La caja o bolsa Clap fue nombrada el 6 de junio del año 2016, a través de una resolución del Ministerio de Alimentación en la cual se establece que se deberían distribuir 19,200 kg mensualmente por hogar. A su vez, establece que dependiendo del grado de vulnerabilidad que haya en cada vivienda se puede dar una caja adicional. Pero, en la actualidad se entregan 1.1 kg de cajas por hogar en todo el contexto del país, eso quiere decir que las familias están recibiendo una caja o bolsa sin importar el número de habitantes que existan por casa. Además, la periodicidad de las mismas está llegando en un lapso de 90 días por familia”.
En este mismo orden de ideas, según se confirmó con la encuestadora Meganalisis, solo el 6,9 % de la población venezolana recibe la caja mensualmente, mientras que el 23,7 % de la población no la recibe nunca. Por otro lado, según el Gobierno, el 78 % de la población recibe la bolsa Clap, pero no te dicen que la adquieren con un promedio de cada 3 meses y tampoco explican que están recibiendo aproximadamente 6 kilos por familia. “Eso no alcanza para la mayoría de las personas y solamente están llegando 4 productos (harina de maíz precocida, pasta, arroz y en algunos lugares enlatados de sardina). Aseveró, Edison Arciniega.
Consultado sobre un estudio publicado por el Observatorio Venezolano de Seguridad Alimentaria y Nutrición, realizado entre diciembre del 2020 y febrero del 2021, que revela que el 70 % de los venezolanos no consume carne de res por su elevado precio, el experto opinó que “lo grave sería
el no consumo de proteínas de origen animal, debería haber un consumo de la misma en un 75 % de gramos por persona diariamente, pero no es así”.
¿Cuál es la situación del sector privado?
“Cada venezolano requiere de 36.740 kg de alimentos por mes distribuido a través de 88 rubros, eso es lo que garantizaría que todos los días consumas las 2.500 calorías, los 75g de proteínas, los 70g de grasa y los 480g de carbohidratos necesarios. Es decir, que se pueda consumir los macronutrientes que permiten una vida sana. En este momento en el país están disponibles como 25 kg de alimentos, estamos 11 kilos por debajo por persona al mes”.
Asimismo, continuó diciendo el experto en seguridad alimentaria, Edison Arciniega, “el sistema alimentario nacional está en proceso de recuperación, aún no llegamos a los niveles que la dieta prototipo nacional requiere, no tenemos los requerimientos cubiertos del país, pero tenemos el doble de los alimentos de hace tres años. Eso es una buena noticia”.
Arciniega, también comentó que el sistema alimentario se está recuperando por el esfuerzo del sector privado, puesto que, el 97% de los alimentos que hay disponibles en Venezuela son aportados por el mismo. Además dijo que “el Estado también está apostando a que la gente consuma alimentos de empresas privadas porque le ha dejado de meter dinero al CLAP y lo está dejando desaparecer”.
El Caso de los Bodegones
Los bodegones no son un nicho relevante. Revisando la rotaciones de productos en un bodegón y en un automercado, podemos observar que la rotación es 7 veces superior a la de un bodegón. El bodegón tiene otro rol económico que no es exactamente la comercialización de alimentos”. Informó el director ejecutivo de la ONG.
Del mismo modo, el experto de Seguridad Alimentaria, expresó que “hay dos grandes macrocategorías de consumidor, la categoría de los consumidores que tienen ingresos estables, dolarizados y regulares y otra categoría que son los que tienen ingresos en bolívares. Por lo tanto, los que tienen ingresos dolarizados están entre el 25% y el 38% de los consumidores, los cuales llegan aproximadamente al 65% de los alimentos en los anaqueles. Sin embargo debo decir que lamentablemente el 60% que tienen ingresos en bolívares, así como una altísima precariedad alimentaria, son aquellos que no comen proteínas de origen animal y la únicas dos proteínas que están consumiendo son la mortadela y huevos”.
Indagando sobre otros temas, Edison Arciniega, enfatizó que “en Venezuela el 99% de la carne es nacional. El único sector económico de la producción de alimentos en el país que abastece plenamente los requerimientos alimentarios es el sector ganadero. Actualmente en Venezuela están los mejores precios de alimentos, la harina de maíz precocida es 40% más económica que en el año 2011, esto se debe a que hoy hay competencia en el anaquel. Se encuentran aproximadamente 7 variedades de diversos grupos económicos. La política de cero aranceles en
las importaciones ha permitido que los sectores económicos productivos nuestros tengan que competir con las importaciones y eso termina beneficiando al consumidor”.
¿Se puede resolver la situación alimentaria en Venezuela?
“Las tendencias alimentarias del país dicen que entre los años 2022-2023 nosotros debemos estar saliendo del estado de emergencia alimentaria, siempre y cuando la inversión que llevamos se mantenga. 800 millones de dólares que ha gastado la ayuda humanitaria en un año, solo llega a 400 mil personas. Nosotros con esa cantidad de capital podemos apalancar un gran plan de siembra en el país, es decir, la ayuda humanitaria ha sido un negocio para los actores humanitarios pero no para los venezolanos. Actualmente lo que está funcionando es la apertura económica, pues cada venezolano debe seguir ingeniándosela tratando de generar ingresos. Al final acá en Venezuela cada venezolano esta solo sin el Estado y sin auxilio internacional, lo único que tenemos es el esfuerzo privado”, concluyó el experto de Seguridad Alimentaria, Edison Arciniega.