El ministro de Exteriores de Reino Unido, Dominic Raab, ha confirmado este viernes que dos británicos y el hijo de otro ciudadano del país murieron en el atentado perpetrado por Estado Islámico durante las evacuaciones en el aeropuerto de Kabul.
Raab, que se ha declarado «profundamente triste» por lo sucedido, ha remarcado que los fallecidos eran personas «inocentes» que, mientras intentaban llevar a sus seres queridos a un lugar seguro, «fueron asesinadas por terroristas cobardes».
«El ataque despreciable del jueves subraya los peligros a los que se enfrentan los que están en Afganistán y refuerza el porqué estamos haciendo todo lo que podemos para sacar a las personas», ha continuado en un comunicado el titular de Exteriores británico, que ha matizado que el Gobierno ya ha ofrecido apoyo consular a las familias de las víctimas.
Por último, Raab ha garantizado que Reino Unido «no dará la espalda» a aquellos que buscan su apoyo, al tiempo que ha afirmado que los británicos «nunca estarán acobardados por los terroristas».
Más de cien personas murieron en el atentado del jueves, que no ha evitado que cientos de personas hayan vuelto a congregarse en el Aeropuerto Internacional Hamid Karzai de Kabul.