Este martes 21 de septiembre, Nicolás Maduro desató una nueva rencilla en el gobierno de Perú, después de que el primer ministro, Guido Bellido, reprendiera públicamente al vicecanciller, Luis Enrique Chávez, por decir que Perú no reconoce a ninguna autoridad venezolana.
En un mensaje publicado en la red social Twitter, Bellido contradijo al viceministro de Relaciones Exteriores y afirmó que «no es la postura del gobierno no reconocer autoridad legítima en Venezuela».
El primer ministro peruano aseguró incluso que el presidente de Perú, Pedro Castillo, se reunió con Maduro durante la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) celebrada en México para solucionar la crisis migratoria de Venezuela, que hace que Perú albergue a casi un millón de migrantes venezolanos.
Este supuesto encuentro entre Castillo y Maduro al que hizo referencia Bellido no había sido informado ni por el gobierno peruano ni por los medios en Venezuela.
«Si al canciller o su adjunto no le gusta, tienen las puertas abiertas», aseveró Bellido en un mensaje directo al ministro de Relaciones Exteriores, Óscar Maúrtua.
Horas antes, el vicecanciller Chávez había asegurado en declaraciones a medios nacionales que el gobierno peruano no reconoce la legitimidad de ninguna autoridad de Venezuela desde el 5 de enero de 2021, la última vez que el Grupo de Lima se pronunció sobre la crisis venezolana.
«Ya hemos señalado que nuestro apoyo es la continuidad de esas conversaciones bajo la facilitación noruega. La mejor manera es no trayendo elementos nuevos que distraigan esa conversación», apuntó.
Sobre el Grupo de Lima, el viceministro señaló que no es necesario ningún acto formal para oficializar la salida de Perú de este mecanismo multilateral promovido hace cuatro años por el expresidente peruano Pedro Pablo Kuczynski para presionar diplomáticamente a Maduro.
En ese sentido, el embajador de Perú ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Harold Forsyth, afirmó que el Grupo de Lima ya «ha cumplido su ciclo» y ahora el Gobierno peruano apuesta por apoyar las conversaciones entre el oficialismo y la oposición.