De cara a las elecciones del 21 de noviembre, expertos que la presencia de misiones de observación internacional es una presión positiva para el cumplimiento de las normas, pues las voces de los observadores tienen una audiencia grande. El hecho de que participen abre el camino para disminuir las violaciones. Destacan que las tareas de estas misiones son similares a las que ejecutan las locales, pero sin ser amedrentadas.
El Poder Electoral, designado por la Asamblea Nacional (AN), aprobó una resolución especial en la que admitió la presencia de estos organismos extranjeros como observadores y les da la posibilidad de, por ejemplo, convocar ruedas de prensa para compartir su valoración del proceso cuando lo consideren necesario, aunque con previa notificación al CNE, y publicar su conclusiones y recomendaciones.
Tras la aprobación de esta resolución, la misión de observación internacional también podrá diseñar su propio plan de actividades, lo que quiere decir que ahora el ente rector no decidirá los lugares o centros de votación que los grupos extranjeros visitarán, como lo hacía. Para estas elecciones la misión también podrá desplegarse en todo el territorio con antelación, en aras de seguir de cerca los preparativos comiciales y el propio día de las elecciones.
Al respecto, el presidente de la asociación civil Súmate, Roberto Abdul, expone que las misiones de observación internacional son cuerpos de expertos que se crean para participar y hacer observaciones, contraloría y veeduría de los procesos electorales, que normalmente se despliegan en países donde existen altos niveles de desconfianza sobre el sistema electoral, tanto por parte de la población como de los cuerpos internacionales.
Sin embargo, indicó que en términos de capacidad, no se diferencian las tareas que hacen estas misiones de las que ejecutan las nacionales. A su juicio, el tema tiene que ver con los niveles de confianza que estas generan, pues, en países como Venezuela, los actores políticos pueden sentir que las misiones de observación locales pueden ser fácilmente vulneradas
Detalla que, básicamente, a través del despliegue de las misiones extranjeras se procura, primero, tratar de generar confianza entre las partes y, segundo, hacer evaluaciones cualitativas y cuantitativas de los procesos electorales para, posteriormente, emitir informes de evaluaciones de cómo se organizó, desarrolló y se realizó el proceso electoral.