La Casa Blanca anunció que ordenó la liberación de 50 millones de barriles de petróleo de la reserva estratégica del país para disminuir los costes de la energía en coordinación con otros países.
Esta decisión es un esfuerzo para bajar los crecientes precios del gas. Los costos de la gasolina en todo el país han alcanzado un promedio de $3.40 el galón, lo que es más del doble que el año pasado, según indicó la Asociación Estadounidense del Automóvil (AAA).
Dicha liberación del producto se ha coordinado con otros países, entre ellos India, Japón, Corea del Sur y Gran Bretaña, quienes son grandes consumidores de energía.
Según fuentes de la Casa Blanca, la puesta en circulación del crudo estratégico se realizará el próximo mes de diciembre. El comunicado indica que 18 millones de barriles ya están autorizados por parte del Congreso. El resto (32 millones de barriles), será liberado en los próximos meses. La Administración de Biden se siente preparada para aumentar el petróleo en circulación.
Liberación de petróleo podría considerarse como una declaración de guerra contra la Opep
Está siendo complicado valorar el impacto de esta medida, pues La OPEP y sus aliados anunciaron que reaccionarán en su próxima reunión con un previsible recorte en su producción.
La maniobra de EEUU y sus socios ya se anticipaba por el mercado. El anuncio de Biden ya supuso una bajada en los precios, con lo que los inversores estaban descontando los riesgos en parte. Desde que empezaron los rumores a principios de mes, el valor del crudo acumula un descenso del 6%.
«El presidente está dispuesto a tomar medidas adicionales, si es necesario, y está dispuesto a utilizar todos sus poderes trabajando en coordinación con el resto del mundo para mantener un suministro adecuado a medida que salimos de la pandemia», manifestó la Casa Blanca.
Desde hace meses el país estadounidense y el resto de la alianza está presionando para que la OPEP aumente el bombeo del crudo ante el repunte mundial de la demanda, según informó El Economista.
Actualmente, el bombeo global asciende a 102 millones. Para igualar el porcentaje de barriles liberados, la cantidad anunciada por EE.UU. y sus aliados contra la OPEP debería superar los 70 millones de barriles.
Estados Unidos tiene una reserva estratégica de 600 millones de barriles de petróleo almacenadas en cuatro cavernas subterráneas a lo largo de las costas de Texas y Luisiana.