Este jueves una explosión en la ciudad de Quetta, capital de la provincia de Baluchistán, en el oeste de Pakistán, dejó a cuatro personas muertas y otras 16 resultaron heridas, las autoridades aún no saben la identidad de los autores.
La detonación ha tenido lugar en las inmediaciones de la Universidad de Ciencias de la ciudad. Las autoridades de Baluchistán han detallado que la detonación ha sido provocada a través de control remoto. El paquete bomba, con unos 2,5 kilos de explosivo estaba situado a los pies de un poste de luz.
El ministro principal de Baluchistán, Abdul Qudoos Bizenjo, ha lamentado las muertes y los heridos en un comunicado en el que ha calificado lo sucedido como «un ataque terrorista» contra la población civil que debe ser castigado de manera «estricta», informa el diario ‘Down’.
«Es responsabilidad de la Policía y de las agencias de seguridad proteger la vida y la propiedad privada. Los ciudadanos no pueden quedar a merced de los terroristas», ha dirigido Bizenjo sus críticas hacia las autoridades de Quetta.
La región cuenta desde la década de 2000 con la presencia de la guerrilla del Ejército de Liberación de Baluchistán (ELB), considerada organización terrorista por Pakistán, Reino Unido o Estados Unidos.
Desde entonces ha librado una cruenta lucha con las autoridades de Islamabad para lograr la autodeterminación de Baluchistán, llegando incluso a ser responsable de la limpieza étnica de las minorías no baluchis en la provincia.