El más reciente informe que publicó USAID sobre Venezuela muestra que más de 6 millones de migrantes y refugiados venezolanos han huido de los estragos causados por el gobierno de Nicolás Maduro lo que la convierte en la segunda mayor crisis de desplazamiento a nivel mundial después de Siria.
El documento señala que las Naciones Unidas publicaron el Plan de Gestión de la Respuesta Regional 2022 a mediados de diciembre, solicitando casi 1.800 millones de dólares en fondos humanitarios para la respuesta a la crisis regional de Venezuela.
Se estima que 7 millones de personas dentro de Venezuela necesitarán asistencia humanitaria en el próximo año, según el Panorama Humanitario Mundial de la ONU de 2022.
Con la financiación de USAID y otros donantes, el PMA llegó a casi 450.000 venezolanos y nacionales de países de acogida en Colombia, Ecuador y Perú en octubre.
Desde 2014, el deterioro de las condiciones económicas y políticas en Venezuela, marcadas por la devastadora hiperinflación, la escasez de medicamentos básicos y la limitada disponibilidad de alimentos, ha contribuido a aumentar las necesidades humanitarias.
El Plan de Respuesta Humanitaria de la ONU para 2021 identificó la seguridad alimentaria, la salud, la nutrición y la protección como necesidades urgentes dentro de Venezuela. La grave escasez de alimentos y medicinas ha llevado a los venezolanos a huir hacia Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, y también a Argentina, México, Panamá y países del Caribe y Centroamérica.
La ONU estima que más de 5,6 millones de venezolanos han abandonado su país desde 2014, y la migración está poniendo a prueba la capacidad de algunas comunidades de acogida, especialmente en las zonas fronterizas de Brasil y Colombia.