Un pastor y líder de una iglesia que funciona en la ciudad de San Cristóbal, identificado como S. M. Monsalve Guerrero, fue condenado a 30 años de prisión, ante las pruebas presentadas por el Ministerio Público, por su responsabilidad en el abuso sexual a un grupo de 10 niños y adolescentes, con edades comprendidas entre los 11 y 16 años.
De acuerdo con boletín del referido organismo, algunas madres de las víctimas, el día 18 de febrero de 2020, acudieron angustiadas ante una delegación de la Policía del estado Táchira, ubicada en la capital tachirense, en donde alertaron sobre lo que sucedía, señalando a Monsalve Guerrero de cometer presuntos abusos de índole sexual en contra de los niños y jóvenes.
En este particular, relataron que el ahora condenado al parecer organizaba sesiones indecorosas grupales y los ungía con una especie de aceite, para, acto seguido, abusar sexualmente de ellos.
Trascendió que las pesquisas habrían determinado que este aceite, incautado durante un allanamiento en la sede de la iglesia, tras las pruebas químicas de rigor, terminó siendo escopolamina: una sustancia psicotrópica que ocasiona aplanamiento cerebral y lapsos de amnesia temporal.
Cuando las víctimas estaban bajo el influjo de esta droga, comúnmente llamada burundanga, el pastor perpetraba los abusos.
En este contexto, es necesario precisar que las experticias forenses determinaron que ocho de las 10 víctimas sufrieron el abuso por parte de Monsalve Guerrero.
Purgará condena en Santa Ana
Luego de la fuerte denuncia, funcionarios aprehendieron ese mismo día al religioso, el cual fue puesto a disposición del Ministerio Público, para iniciar el proceso penal correspondiente.
En el juicio, la Fiscalía 16ª de Táchira ratificó la acusación contra el hombre, como coautor de abuso sexual consumado en perjuicio de tres niños, de 10, 11 y 12 años de edad.
A su vez, se ratificó la acusación por abuso sexual a adolescentes, en perjuicio de cinco adolescentes, uno de 13 años, dos de 14 años, uno de 15 años y otro de 16 años.
De igual modo, se ratificó la acusación por abuso sexual a adolescentes sin consumar el hecho, en detrimento de dos adolescentes de 13 y 14 años de edad.
Una vez evaluados los elementos de pruebas por parte de la representación fiscal, el Tribunal 5º de Juicio dictó la mencionada condena en contra de Monsalve Guerrero, ordenando su reclusión en el Centro Penitenciario de Occidente –CPO-, ubicado en Santa Ana del Táchira.
