Con sus conocimientos en armería, un expolicía se dedicaba a fabricar armas de fuego para venderlas a delincuentes que sometían a comerciantes y habitantes de Barcelona, Anzoateguí.
La información suministrada por el Cicpc reseña que Antonio José Fernández Guerra (44), alias El Armero (44), fue capturado en el sector Camino Nuevo, calle La Cuerera, parroquia El Carmen, municipio Simón Bolívar, Barcelona, estado Anzoátegui, la Delegación Municipal Barcelona, tras confirmarse que estaba encargado de proveer de armamento y realizar modificaciones a las armas en poder de los diferentes azotes de la zona.
En el procedimiento se colectó como evidencia un arma de fuego, calibre 12 mm; un revólver, calibre 38; seis cañones de ánima lisa, tipo escopeta, calibre 12 y 22 mm; cuatro conjuntos móviles para escopeta, siete disparadores de armas de fuego largas y cortas de diferentes calibres, tres culatas de madera, para escopeta; cinco municiones calibre 7,62 por 39 mm, 22, 40 y 45 mm, un fulminante, dos cargadores de fabricación rudimentaria, un taladro industrial, dos prensas de mesa y diversas piezas internas del mecanismo de armas de fuego de diferentes marcas y modelos.