La lucha de los trabajadores sigue incrementándose en todo el país. Los conflictos, marchas, concentraciones y paros hoy están a la orden del día, tanto en el sector público como en el privado, rechazando las violaciones a los derechos laborales, la destrucción del salario y las convenciones colectivas. A partir de mayo de este año la situación se agravó con la estafa de las tablas salariales en la administración pública mediante el inconstitucional instructivo de la Oficina Nacional de Presupuesto (ONAPRE) que cercenó primas y otros beneficios, disminuyendo las remuneraciones del personal al servicio del Estado.
Ante esta arremetida del régimen de Nicolás Maduro, la clase trabajadora se ha venido organizando. Trabajadores activos, jubilados y pensionados han ido creando movimientos, frentes de lucha y plataformas unitarias para afrontar esta política antiobrera que mata de hambre a nuestro pueblo. Ahora es momento de que estas luchas se unan en una sola lucha. Obreros, jubilados, pensionados, estudiantes, amas de casa, economía informal, agricultores, cultores populares, solo unidos podemos marchar hacia una salida que le dé felicidad a todos los hogares de nuestro país. Para ello es necesario escoger un liderazgo que piense en el bienestar colectivo y una patria grande de beneficios y riqueza para los venezolanos. Un liderazgo de mujeres y hombres probados en las luchas y en combate contra la corrupción.
Construyamos un gran movimiento sobre la base de un programa de reconstrucción nacional, que la estrategia sea el cambio político, donde la clase obrera y los trabajadores sean los pilares fundamentales de la economía venezolana. La dirección política tiene que entender que estamos enfrentando a un régimen militarista corrupto al que no le tiembla el pulso para responder con la represión, la cárcel y hasta la muerte contra los anhelos de cambio de la mayoría de los venezolanos. Esto no nos puede detener.
En los últimos días hemos visto la represión hacia el PCV y el partido Bandera Roja, en el cual milito desde hace 45 años. Ambas organizaciones con sobrada experiencia en vivir la represión, persecución, asesinatos y desaparición de sus militantes en manos del Estado. Ni la dictadura de Marcos Pérez Jiménez ni el Puntofijismo pudieron acallar nuestras voces por la libertad. Mucho menos podrá hacerlo Nicolás. En años anteriores fueron objeto de esa represión los compañeros de Voluntad Popular y de Primero Justicia. Aquí nos mantendremos, en la política y la acción junto al pueblo.
Bandera Roja Miranda ratifica su compromiso con las luchas al lado de los trabajadores, por la libertad de todos los presos políticos civiles y militares; por aumento de sueldos y salarios de acuerdo al monto de la canasta básica.
“Que si la lucha se dispersa, no habrá victoria popular en el combate”.
No subestimemos ninguna lucha.
La reivindicativa.
La lucha de los pensionados y jubilados.
La lucha por salud, educación, vivienda, servicios públicos.
La lucha electoral.
“Luchar, luchar hasta que la victoria nos sorprenda”.
Douglas Tineo
Secretario General
Bandera Roja
