El diputado opositor Edgar Zambrano dijo hoy que el estado de salud «delicado» por el que atraviesa el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dificulta las gestiones que la oposición realiza a favor de la liberación de quienes califica como «presos políticos».
«Por supuesto que la enfermedad del presidente ha mermado de alguna manera la eficiencia de las gestiones pero toda resolución tiene su tiempo y para beneficio de quienes están en prisión y los exiliados, el tiempo de Dios es perfecto», dijo Zambrano a periodistas.
Chávez se encuentra hospitalizado desde hace 22 días en La Habana, donde fue sometido a una intervención quirúrgica para paliar el cáncer que lo ha aquejado desde 2011 y actualmente afronta «nuevas complicaciones» que lo mantienen en un estado «delicado».
El diputado del partido Acción Democrática (AD), quien lidera la iniciativa de un grupo de legisladores de oposición para impulsar una Ley de Amnistía, apuntó que conversará con la directiva del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) para seguir avanzando en las gestiones.
«Esperamos que la directiva del PSUV, como organización política fundamental en el país y que tiene un poder de decisión sobre la gran mayoría de todo lo que tiene que ver con las instancias del gobierno nos permita explicar al detalle cada una de las situaciones específicas de las personas que permanecen en prisión y exiliados», dijo.
Sin embargo, el vicepresidente del PSUV y presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, dijo el pasado sábado que en Venezuela «no hay presos políticos» y aclaró que de parte del Gobierno nacional «no habrá ninguna negociación» para lograr la libertad de los calificados por la oposición como presos políticos.
«A la directiva del PSUV nuestros respetos, a mi amigo Diosdado Cabello, nuestro respeto, y estamos seguros de que el primer interesado en que rindamos ese informe ante la directiva del PSUV es el propio Diosdado Cabello», aseguró Zambrano.
Chávez dijo a principios de octubre, antes de las elecciones en las que renovó el mandato, que podría evaluar una amnistía a Pedro Carmona, cabeza visible del golpe de Estado de abril de 2002, quien además se autoproclamó presidente y suspendió las instituciones democráticas del país.
«No se trata de que yo quiera o no quiera, son hechos demasiado graves pero ya que insistes habría que evaluarlo porque el tiempo va pasando», dijo el presidente durante una entrevista transmitida por el canal estatal de televisión. EFE