Presidente Nicolás Maduro, los que hemos tenido responsabilidades políticas conocemos de primera mano su preocupación, incluso angustia, por corresponder con beneficios reales posibles y la protección diaria de los trabajadores y trabajadoras. Sabemos que usted no se conforma con lo que puede lograr para nuestro pueblo venezolano, siempre está exigiendo un esfuerzo adicional al equipo de gobierno, para obtener recursos lícitos de donde sea posible, a pesar de las sanciones ilegales -¡Criminales!- con las que el imperialismo y sus lacayos pretenden castigar a nuestro pueblo, por no doblegarse a su mandato.
Vaya nuestro apoyo y nuestro agradecimiento por su indeclinable voluntad de solventar, a pesar de las más grandes dificultades económicas, los problemas urgentes que aquejan a la población asalariada. El ingreso de los trabajadores es uno de ellos, y no nos cabe duda de que usted comprende más que nadie, las crecientes necesidades que nos obligan a disponer de más recursos para satisfacer esas necesidades. Mientras más pueda entregar más entregará, lo sabemos. Por eso nuestro Comandante Supremo Hugo Chávez lo escogió, el sabía que usted conocía como hemos aprendido a conocerlo nosotros, que es un incansable luchador comprometido con la causa popular.