El presidente de la Asamblea Nacional y una de las principales figuras del chavismo, Diosdado Cabello, fue reelegido este sábado por el hemiciclo para continuar en su cargo durante un año.
«Mayoría evidente, aprobado», dijo el propio Cabello tras someter a votación su candidatura en la Asamblea Nacional (unicameral), en la que el gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), del presidente Hugo Chávez, ostenta la mayoría.
La elección se da en momentos de gran incertidumbre en Venezuela debido a la gravedad del estado de salud de Chávez, hospitalizado en Cuba desde el 11 de diciembre. Cabello, de 49 años, es un exteniente que participó en la intentona golpista fallida de Chávez en 1992 y es considerado de la línea dura del chavismo.
Minutos después, Cabello juró su cargo: «Jamás defraudaremos al pueblo y estaremos rodilla en tierra a defender la propuesta hecha por el comandante Chávez, lo juro».
La votación se dio en presencia del vicepresidente Nicolás Maduro, el ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, y de Economía, Jorge Giordani, entre otros miembros del gobierno.
Además de Cabello, fue elegido el conjunto de la junta directiva de la Asamblea Nacional, integrado por Darío Vivas y Blanca Eekhout como primer y segunda vicepresidenta de la AN e Ivásn Serpa y Víctor Clark como subsecretario, todos ellos miembros del PSUV.
La oposición criticó la falta de «pluralidad» de esa junta en momentos de incertidumbre política en el país.
Chávez, reelecto en octubre, debería asumir un nuevo periodo de gobierno el día 10 ante la Asamblea Nacional, pero el propio gobierno ha reconocido la posibilidad de que no pueda estar presente por su delicado estado de salud.
El gobierno sostiene que la juramentación de Chávez, prevista esa fecha por la Constitución, es un mero «formalismo», y que el propio texto prevé que en caso de imposibilidad, pueda hacerlo ante el Tribunal Supremo de Justicia, sin fijar fecha.
Según algunos dirigentes opositores, el 10 de enero termina el mandato de Chávez, y por ende de todo su gabinete, y si no asume la presidencia para su tercer mandato, debe declararse la «falta temporaria» del Jefe de Estado.
El diputado opositor Ismael García, que había militado en el oficialismo, dijo por su parte en el hemiciclo que «es de la opinión» que el «presidente sigue siendo presidente» del país aunque no pueda asumir el día 10. Pero la Asamblea «tiene que debatir entonces, tal y como lo establece la Constitución, el camino que tenemos que tomar», agregó.
AFP