exmandatario socialista Rafael Correa (2007-2017), se enfrentará a la sorpresa Daniel Noboa, hijo de uno de los hombres más ricos de Ecuador, luego de que ambos se proclamaran vencedores de los comicios el domingo, en los que han obtenido 33% y 24% de los votos respectivamente, tras el escrutinio del 98% de las actas el lunes.
En una tensa jornada, los aspirantes votaron protegidos por esquemas de seguridad inéditos, chalecos y cascos antibalas, en medio de un estado de excepción desde el magnicidio del presidenciable Fernando Villavicencio el 9 de agosto.
González, de 45 años, y Noboa, de 35, protagonizarán un nuevo choque entre la izquierda y la derecha, que se enfrentan por tercera vez consecutiva en el pequeño país de 18,3 millones de habitantes.
«Estamos haciendo historia», dijo González al celebrar su «gran triunfo» en esta primera vuelta, mientras que Noboa aseguró que «la juventud» lo escogió «para ganar al correísmo».
Un país en conflicto
El otrora pacífico país se ha convertido en los últimos años en un centro de operaciones de carteles de droga extranjeros y locales que imponen un régimen de terror con matanzas, secuestros y extorsiones.
«Estamos con el corazón roto por tanta delincuencia», dijo Magdalena Mejía en el pueblo costero de Canuto (suroeste), donde sufragó González, que podría convertirse en la primera mujer presidente de Ecuador.
En los comicios se registró una participación de 82% de los 13,4 millones de ecuatorianos convocados al voto obligatorio. En el extranjero se registraron «dificultades» para sufragar por vía electrónica, según autoridades.
El correísmo ensanchó y fortaleció el Estado e impulsó la modernización de Ecuador aunque, de acuerdo con sus críticos, a costa de un estilo autoritario y salpicado de corrupción.
Magnicidio
A la violencia se suma una crisis institucional que tiene al país sin Congreso desde hace tres meses, cuando el impopular presidente Guillermo Lasso, un exbanquero de derecha, decidió disolverlo y llamar a elecciones anticipadas para esquivar la destitución en un juicio político por peculado.
El rostro del fallecido Villavicencio, un experiodista de centro, estaba en las papeletas de votación junto a otros siete candidatos, pues ya estaban impresas cuando fue tiroteado por un sicario colombiano.
Lo reemplazó en la candidatura el periodista Christian Zurita, su mejor amigo y compañero en investigaciones que desnudaron grandes escándalos de corrupción. Uno de ellos derivó en la condena a ocho años de cárcel de Correa, que maneja los hilos de su fuerza política desde el exilio en Bélgica.
«Son momentos difíciles y oscuros para el país», lamentó el candidato de 53 años, que va tercero (17%) en el conteo preliminar.
A continuación se ubican los derechistas Jan Topic, exfrancotirador y exparacaidista con 15%, y el exvicepresidente Otto Sonnenholzner con 7%, además del líder indígena de izquierda Yaku Pérez con 4%.
Noboa, la sorpresa
Ecuador bajó el telón de una campaña corta empañada por la violencia política en la que también fueron asesinados un alcalde, un candidato a diputado y un dirigente local del correísmo.
El magnicidio barajó las cartas de la contienda electoral, en la que Noboa aterrizó de sorpresa aupado por un sector de la derecha y el voto joven, según expertos.
Es hijo de Álvaro Noboa, uno de los hombres más acaudalados de Ecuador, quien afirma que fue un niño con «ímpetu», un adolescente «responsable» y ahora se ha tornado un joven «exitoso».
La candidatura de Daniel Noboa, que podría convertirse en el gobernante más joven del país, subió como espuma tras el único debate presidencial, al que se presentó con un chaleco antibalas alegando amenazas de muerte.
Bandas vinculadas a carteles mexicanos y colombianos se enfrentan por el negocio de la droga y usan como centro de operaciones las cárceles, donde han ocurrido cruentas masacres que dejan 430 reclusos muertos desde 2021.
El año pasado Ecuador alcanzó un récord de 26 homicidios por cada 100.000 habitantes, casi el doble de 2021.
La pobreza alcanza al 27% de la población en una economía dolarizada, y un cuarto de los ecuatorianos tienen trabajo informal o están desempleados.
Un histórico referendo para frenar la explotación de crudo en una parte del parque nacional amazónico Yasuní también fue votado este domingo, en momentos en que el mundo busca reducir los combustibles fósiles y mitigar el calentamiento global.
«¿Qué planeta vamos a dejar a nuestras generaciones futuras?», se preguntó en Quito el funcionario Luis Veloso, de 52 años, quien se opone al petróleo que representa el 10% del PIB.
Escrutado un 98% de las actas, el Sí para mantener el crudo bajo tierra obtenía un 59% de apoyo.
AFP