A los chavistas, no sigan provocando al pueblo y limítense a cumplir con sus obligaciones, le guste o no el 44% de los venezolanos no comparte el pensamiento del Socialismo del Siglo XXI.
La pregunta sería ¿cómo se puede convivir con quien no reconoce la voluntad del pueblo?, un hecho fácil y deducible después de haber visto el gran circo armado con la elección y juramentación de la nueva directiva de La Asamblea Nacional, en ese acto lo único que pudimos apreciar fue, en primera instancia la pelea interna de los bandos que buscan manejar el poder dentro del Partido Socialista Venezolano.
Lo segundo la gran sumisión (por no emplear otra palabra más dura) de esos seudos dirigentes o como ellos se llaman “la voz del pueblo”, cuando en vez de guardar el respeto al histórico acto que se llevaba a cabo se deshicieron en halagos, en mucho casos impropios, al señor Presidente electo Hugo Chávez Frías, un hecho que ha quedado impreso en las páginas de nuestra historia.
Hoy será un día de mucha importancia para que el pueblo venezolano entienda que es más importante: Nuestra Constitución o la posición radical de hombres que no piensan en la patria si no que buscan defender una causa política y doctrinaría, no contemplada en nuestra Constitución, de un mal llamado Socialismo del Siglo XXI, lo delicado del asunto es que su compromiso no está apoyado en la patria si no en la voluntad de un hombre y la destrucción de nuestro país.
Para los venezolanos concientes y democráticos esa destrucción y la vejación a todas las normas constitucionales se podrían comparar (por supuesto guardando el respeto y la distancia correspondiente) con todo lo que vivió nuestro Señor Jesucristo, el fue humillado, ofendido, descalificado, martirizado, crucificado y muerto por la causa que defendió, algo muy parecido a lo que hicieron en esa cómica escogencia y luego juramentación de los miembros de La Junta Directiva de La Asamblea Nacional.
Sin embargo Nuestro Señor resucito entre los muertos y está sentado a la derecha del Dios Padre y desde ahí juzgará a vivos y muertos. Su doctrina se consolido como una doctrina de salvación y perdón. Quizás sea el momento de pensar que la verdad, la razón y el amor permanecerá en el corazón de los pueblos y los incrédulos tendrá su merecido castigo.
Esperemos, con la confianza de Dios, que la democracia saldrá triunfante aunque muchos intereses mezquinos y personales traten de imponerse, realmente creemos que el teniente coronel Hugo Chávez es el Presidente de Venezuela y por ende de todos los venezolanos, lo cual nos permite opinar que no habrá quien se interponga entre la Constitución y la Patria y mucho menos contradecir las indicaciones que el propio Presidente giro a sus seguidores y en donde dejo claro que si el no podía ocupar la Primera Magistratura sería Nicolás Maduro su sucesor, dando por hecho que se debería cumplir con lo establecido en La Constitución Bolivariana de Venezuela. Lo demás será coser y bordar sobre una orden Presidencial.
Solo a medida de consejo a los chavistas, no sigan provocando al pueblo y limítense a cumplir con sus obligaciones, le guste o no el 44% de los venezolanos no comparte el pensamiento del Socialismo del Siglo XXI.
Salomón Benshimol R/ sbenshimol@yahoo.com