Eduardo Iglesias, con sus raíces en Puerto La Cruz, Venezuela, ha evolucionado de ser un amante del graffiti y la pintura a convertirse en una prominente figura en el mundo del tatuaje. Con una carrera de 13 años, su viaje desde Venezuela hasta Argentina está marcado por su dedicación al arte y su búsqueda incesante de la expresión única.
El comienzo en Venezuela: De las calles a los estudios de tatuaje
Desde su infancia, Eduardo manifestó su amor por las formas artísticas. Inicialmente exploró la pintura, el dibujo y el graffiti, deslumbrando con sus creaciones en óleo y sus intervenciones urbanas. Su incursión en el tatuaje se gestó al observar a amigos que ya se sumergían en este arte. En 2010, adquirió su primera máquina, marcando el inicio de su travesía como tatuador.
De giras por Venezuela a su establecimiento en Argentina
En los primeros años, Eduardo recorrió Venezuela, participando en convenciones y perfeccionando su arte. En 2015, se unió a un estudio de tatuajes, y dos años después, buscó nuevos horizontes en Argentina. Este movimiento no solo cambió su ubicación, sino también su perspectiva artística.
Argentina: Una tierra de oportunidades y reconocimientos
En Argentina, Eduardo expandió su red, exploró diferentes estilos y consolidó su identidad artística. Su incursión en el realismo, el color y el black and grey lo llevó a destacar en convenciones locales. En 2022, su participación en Europa como artista invitado fue un hito trascendental, allanando el camino para más reconocimientos.
El estilo único de Eduardo: Free Style en color
Su enfoque «Free Style en Color» es la marca distintiva de Eduardo. Alejándose de patrones convencionales, este estilo le otorga libertad creativa, permitiéndole plasmar su imaginación directamente en la piel de sus clientes. Con una paleta vibrante y contrastes intensos, sus tatuajes se convierten en piezas cautivadoras.
El presente y el futuro de Eduardo Iglesias en el tatuaje
Eduardo no solo ha dejado su marca en la piel de sus clientes; ha construido un legado en el mundo del tatuaje. Su especialización en realismo y free style lo ha llevado a ganar reconocimiento en revistas especializadas y a asegurar patrocinios de marcas prominentes como Jconly y tktx.
Argentina ha sido más que un hogar para Eduardo; ha sido el escenario donde ha crecido como artista y ha forjado conexiones valiosas. Su viaje sigue rodando, y su tinta continúa dejando una impronta única en la piel y en la escena del tatuaje.
