El presidente de Ecuador, Rafael Correa, dijo este miércoles que una ausencia de Hugo Chávez en la presidencia de Venezuela sería un «golpe» para la región, pero anotó que el proceso político que éste lidera en Latinoamérica debe continuar.
Correa señaló que llegado el caso en que Chávez «no pueda actuar» sería un «fuerte golpe para América Latina», según declaraciones difundidas por el periódico electrónico del gobierno.
Sin embargo, apuntó que «todos somos necesarios pero nadie debe ser imprescindible, y el proceso revolucionario en nuestra América deberá continuar».
Correa se abstuvo, en tanto, de emitir opiniones sobre la polémica en Venezuela por la interpretación constitucional alrededor de la toma de posesión de Chávez, convaleciente en Cuba de una nueva operación contra el cáncer que padece.
Este miércoles, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano avaló la continuidad en sus funciones del gobierno de Chávez, aunque éste no jure mañana jueves ante la Asamblea Nacional y lo haga en fecha posterior ante esa corte, decidiendo así la controversia legal entre el oficialismo y la oposición.
Entretanto, el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, viajó este miércoles a Caracas para asistir el jueves a un acto convocado por el Ejecutivo venezolano en apoyo a Chávez, quien debía asumir su tercer mandato de seis años.
«Hemos sido invitados por el gobierno de Venezuela, es una presencia de acompañamiento respetuoso a la democracia venezolana y también a un presidente que es un gran amigo de la integración latinoamericana, un hombre valiente que ha impulsado un gobierno popular y que está en una situación de salud que le impide en este momento personalmente asistir a la posesión», dijo el diplomático antes de partir.
Patiño enfatizó en un comunicado que «estaremos ahí para acompañar en este nuevo inicio de período de gobierno» de Chávez.