Un delegado sindical de la Unión Bolivariana de Trabajadores, fue asesinado de un disparo en la parte posterior de la cabeza, cuando se encontraba con un sobrino y otros amigos frente a la obra donde estaba destacado, en la entrada de Gramovén, Catia, sede de los antiguos galpones de la empresa Coca Cola.
La víctima, identificada como José Arnoldo Mora, de 31 años de edad, fue trasladada por sus acompañantes al hospital de Los Magallanes de Catia, pero ya sin vida.
Su padre José Mora vino desde Los Valles del Tuy al enterarse de lo ocurrido. Lo llamaron el jueves a las 3:30 de la tarde y le dijeron que habían matado a su hijo en Catia, cerca de la obra donde tenía aproximadamente un año laborando. No sabe si fue un intento de robo de la camioneta u otro el móvil. “Dejamos el caso en manos de la policía que hace las investigaciones”, comentó.
Mora estaba con un sobrino y otras personas cerca de su camioneta Toyota Autana, verde, revisando un carro que pensaban comprar. Mientras miraban el motor del vehículo y toda la parte interna, de manera intempestiva llegó un sujeto y le dio el tiro de gracia. La bala tuvo entrada y salida y se incrustó en el capó del carro que estaba en venta.
El homicida es un hombre flaco, alto que desapareció del lugar. Mora era casado, vivía en Cotiza y dejo un hijo de 8 años. “Cada día hay muertos y muertos, y usted ve a la gent e en la morgue retirando a su familiar. Es terrible lo que se está viviendo, el gobierno debe meter la mano, ayudar a resolver este problema”, dijo su padre.
A Mora no le robaron nada. Sus acompañantes lo llevaron al hospital y por su mismo celular buscaron el número y llamaron al padre.
AA /LA VOZ