«A palabras necias oídos sordos», al menos eso es lo que ha debido pensar la eterna Hanna Montana a juzgar por sus últimas acciones. Y es Miley Cyrus ha sido pillada en un conocido club neoyorquino besándose con una amiga.
Tal y como publica el portal de noticias estadounidense ‘Hollywood Life’, la que fuera una de las estrellas más rentables de la factoría Disney ha sido vista divirtiéndose junto a una amiga a la que besó en la boca en una fiesta que tenía lugar el pasado jueves en The Darby, un concurrido local de Nueva York.
Previamente, se puedo ver a la pareja de amigas disfrutando de una maravillosa cena en ‘La Esquina’, un exclusivo restaurante situado en Manhattan, según añade la publicación norteamericana.
«Miley no es lesbiana, se lo ha tomado como un piropo», ha declarado una fuente cerca a la actriz y cantante californiana a ‘Hollywood Life’.
Parece que Miley Cyrus quiere demostrar lo poco que le han afectado los comentarios en las redes sociales surgidos a raíz de su radical corte de pelo.
Agencias