«No estamos retrocediendo, estamos avanzando», sostuvo el mandatario demócrata en una declaración teñida de la retórica de su campaña de reelección
WASHINGTON (AP) — En respuesta a las críticas sobre la percepción de que el gabinete tiene menor diversidad en su segundo período de gobierno, el presidente Barack Obama instó el lunes a los estadounidenses a no apresurarse a emitir juicios sobre quién a quien designará para reemplazar a los miembros de su equipo que partirán.
«No estamos retrocediendo, estamos avanzando», sostuvo Obama en una declaración teñida de la retórica de su campaña de reelección.
Ha estado creciendo el escrutinio sobre la cifra de mujeres y miembros de las minorías de quienes se rodeará el primer presidente de raza negra del país en su segundo mandato de cuatro años.
Los miembros del gabinete que dejarán el cargo al final de su primer período —como la secretaria de Estado Hillary Clinton— están siendo reemplazados mayormente por hombres blancos. Sin embargo, en la última conferencia de prensa en la Casa Blanca de su primer período, Obama hizo poco caso de las quejas, pidiendo a los críticos que dejen de hablar hasta que se llenen las vacantes restantes.
«Estoy muy orgulloso de que en los primeros cuatro años, tuvimos una Casa Blanca y un gabinete tan diverso, o más, que cualquiera en la historia», afirmó Obama. «Intento continuar con eso, porque resulta que cuando uno busca a la mejor gente, dada la increíble diversidad de este país, uno va a terminar con un personal diverso».
Recorriendo una lista de puestos de alto rango ocupados por mujeres en su primer período, —tales como Clinton y la secretaria de Salud y Servicios Sociales Kathleen Sebelius— Obama dijo que las mujeres representaron 50% de su personal de la Casa Blanca durante sus primeros cuatro años, sin mencionar a las dos mujeres que nominó para cubrir vacantes en la Corte Suprema.
No obstante, era improbable que la solicitud de paciencia por parte de Obama sofoque las preocupaciones de miembros de su propio partido que han manifestado preocupación públicamente sobre si el gabinete y grupo de asesores de Obama terminará estando conformado casi por completo con hombres y blancos, en contraste con la coalición diversa de mujeres, hispanos y minorías que ayudaron a darle un segundo período.
Obama nominó al senador de Massachusetts John Kerry para reemplazar a Clinton en el Departamento de Estado después de que la embajadora estadounidense ante la ONU Susan Rice, quien es negra, pidió que no se le considerara para ocupar el cargo. Los republicanos habían explotado contra Rice sobre sus comentarios iniciales respecto a los ataques a estadounidenses en Bengasi, Libia.
La secretaria del Trabajo Hilda Solís, quien es hispana, renunció la semana pasada, sumándose a una lista de salidas que incluye a la administradora de la Agencia de Protección Ambiental Lisa Jackson, quien es negra. Obama no ha anunciado a quiénes nominará para ocupar esos puestos. La secretaria de Seguridad Nacional Janet Napolitano permanecerá en el cargo durante el segundo período presidencial de Obama.
Mientras tanto, el secretario de Justicia Eric Holder, quien es de raza negra y el secretario de Asuntos de los Veteranos de Guerra Eric Shinseki, de ascendencia japonesa-estadunidense, se quedarán, dijo la semana pasada un vocero de la Casa Blanca.
AP