Los Ángeles Lakers confirmaron ayer su resurgimiento con una importante victoria (105-96) frente al equipo con el mejor registro de la NBA, Oklahoma City Thunder, en un partido que volvió a ver, por segunda jornada consecutiva, al Kobe Bryant más desprendido (14 asistencias, a una de su récord).
Bryant acabó con 21 puntos, 14 rebotes y 9 asistencias, mientras que Pau Gasol firmó 16 tantos (7/10 en tiros), 4 rebotes y 4 asistencias. Por parte de los Thunder destacaron Kevin Durant, con 35 tantos, y Russell Westbrook, con 17 tantos, 13 asistencias y 9 rebotes.
Serge Ibaka colaboró con 10 puntos, 6 rebotes y 4 tapones.
Una versión sólida de los Lakers se benefició de la falta de inspiración y acierto en el tiro de su rival en el arranque del choque (2/9, 3/13). Bryant cometió varias pérdidas de balón pero lo enmendó con su renovado interés en asistir a sus compañeros, algo de lo que se beneficiaron Steve Nash, Metta World Peace y Antawn Jamison, principalmente.
Celtics 100, Heat 98
Paul Pierce encestó la canasta de la ventaja definitiva cuando restaban 31 segundos del segundo tiempo extra y los Celtics de Boston derrotaron el domingo por 100-98 al Heat de Miami después de enterarse que su estelar armador Rajon Rondo se perderá el resto de la temporada por una lesión en la rodilla derecha.
Rondo será operado tras sufrir un desgarre en el ligamento anterior cruzado de la rodilla derecha. Se lesionó hacia el final del partido que perdió Boston por 123-112 ante los Hawks de Atlanta, también en doble tiempo extra, la noche del viernes.
Este fue el primer juego en Boston para Ray Allen desde que dejó a los Celtics tras cinco temporadas y firmó como agente libre con Miami. Anotó 21 puntos.