Más de 20 secuestros express reportan en lo va del mes de enero. De continuar la situación el éxodo de compradores de esta tradicional zona caraqueña será inevitable, así como el cierre de muchos locales
«Una banda de malandros se esconde en la llamada “Torre de David”, o “Torre Confinanzas”, invadida hace siete años, y “donde los cuerpos policiales les da miedo entrar”
Las inmediaciones del mercado de Guaicaipuro se han convertido en el centro de operaciones del hampa común, que se dedican a la modalidad, del llamado secuestro express.
Comerciantes, proveedores, y la comunidad de las inmediaciones, de San Bernardino, La Candelaria Sarria, Guaicaipuro, Andrés Bello, Santa Rosa, Av. Libertador, Los Caobos, Quebrada Honda y Maripérez, están a merced de estos grupos delictivos que actúan impunemente dentro y fuera de las instalaciones del mercado de Guaicaipuro.
“Y van de 7-7”
Pedro, así simplemente, vendedor, quien nos pidió no hacerle fotos, ya que su integridad física peligra, reconoció que ahora el mercado de Guaicaipuro es zona roja. “Ello nos perjudica, porque esta es nuestra fuente de trabajo, pero no hay manera que ni la Policía Nacional Bolivariana (PNB), Cicpc, Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y ni siquiera el Sebin, atiendan nuestras denuncias y mucho menos a quienes han sido víctimas de estos delincuentes.
Refirió Pedro que en la semana del 3 al 14 de enero del presente año, ha presenciado, en la parte posterior del mercado, es decir, hacia donde se encuentra la parte lateral del edificio de la CANTV, un total de siete personas, golpeadas, todas ellas damas incluso con sus niños, y obligadas a empujones a subirse a un vehículo modelo Machito de color gris, sin placas, todas víctimas de una banda de inadaptados, que se esconde en la llamada “Torre de David”, o “Torre Confinanzas”, invadida hace siete años, y “donde los cuerpos policiales les da miedo entrar”.
Refiere que incluso se han dirigido al alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez, para que implemente un trabajo de inteligencia en esa invasión con Policaracas, “pero no nos han parado. Las ventas han bajado considerablemente a raíz de esta situación”.
“Nariz de tornillo”
Así se hace llamar el popular personaje que vive en el barrio Santa Rosa, uno de los más tradicionales de Caracas. Es pintor y artesano. Asegura que: “no hay que comerle coba a esos bichitos sino al contrario darles con todo”. Comenta que a diario, entre martes y domingo, debe acompañar a su mamá al mercado donde ella tiene un puesto y también ha sido víctima de arrebatones, dejándola sin el dinero producto de su trabajo.
Lluvia de botellas
Por su parte, la señora Emperatriz, residente en uno de los edificios de la zona, nos relató, que el pasado lunes 14 de enero, a eso de las 10 de la mañana, presenció cómo dos sujetos a bordo de un jeep modelo Machito de dos puertas, de color gris, arrastraron y golpearon a una señora que se dirigía al mercado de Guaicaipuro. Al comenzar a gritar varias personas que se encontraban en la licorería de la esquina, comenzaron a lanzar piedras y botellas y grupos de comerciantes informales enardecidos cercaron el vehículo, impidiendo el secuestro. A los maleantes no les quedó otra que arrojar a su víctima contra la acera y huir en sentido contrario hacia la avenida Libertador. Confesó Emperatriz que a pesar de llamar al 171 y dar la novedad, ningún cuerpo policial hizo acto de presencia.
Linchamiento
en puertas…
Dos ciudadanos del sector que dijeron ser miembros de las Mesas de Seguridad del Consejo Comunal, afirmaron que en vista de que las autoridades con su negligencia han permitido que esta situación llegara a estos extremos, dijeron estarse organizando para ellos mismos ponerle las manos a estos delincuentes «y hacer que la justicia se cumpla (…) Esta siempre ha sido una zona tranquila, a pesar de todas las cosas, y nunca antes habíamos estado a merced de estos grupos delictivos. Guerra avisada…», dijeron ambos…
Crónica anunciada
El 14 de septiembre del 2012, el portal web “Fuera Chávez”, relató lo siguiente: “Los policías del CICPC (PTJ) se encontraron por casualidad a unos integrantes de una banda de secuestradores que estaban comprando caraotas en el Mercado de Guaicaipuro. Se cayeron a tiros ahí mismo, y mataron a uno de los malandros, pero los otros se escaparon tranquilamente. Al que mataron, lo levantaron del piso después de un rato y le cayeron a coñazos para ver si decía alguna cosa acerca de un presunto secuestro de una mujer, pero como el tipo estaba muerto, obviamente no dijo nada (¿¿!!). Luego lo dejaron ahí tirado un rato como un animal para que la gente que estaba de curiosa alrededor pudiera satisfacer su morbo. El suceso se registró frente a la puerta número 8 del mercado de Guaicaipuro. Se desconocen más detalles del hecho y los curiosos tomaron burda de fotos que no podemos publicar porque violan las normas de moral y luces boliburguesianas», refiere el mencionado portal web