Por más de siete años este elocuente frutero atiende a una numerosa clientela en la carretera vieja Petare-Guarenas a la altura de Mampote ofreciendo los mejores precios y ricos frutos
Trabajando arduamente bajo el inclemente sol que cae sobre la ciudad mirandina de Guarenas, Prebístero Sandoval ha logrado cumplir varios de sus sueños y metas, distinguiéndose en el sector de Mampote por tener las mejores y frescas frutas a parte del excelente trato que tiene para con sus clientes.
En medio de sus quehaceres cotidianos en su pequeño y llamativo puesto, Sandoval comentó al equipo periodístico de La Voz que lleva más de siete años en ese mismo punto al cual muchas personas de las comunidades aledañas y de las empresas que allí se encuentran, van a cualquier hora del día para llevarse sus respectiva mano de cambúr o una dulce patilla, adicional de entablar una amena conversación con el elocuente Prebístero.
Cosechando logros
Durante la entrevista, Sandoval resaltó que gracias a ese «puestico de frutas» logró cumplir con su sueño de construir su tan anhelado vivero, el cual llevaba más de 20 años esperando por levantar y con el resultado de su labor diaria como frutero pudo hacerse espacio para dedicarse a lo que más lo apasiona: La botánica.
Asimismo, logró adquirir su carrito que «lo lleva y lo trae a todos lados», y así puede dedicarse sin ningún problema a la botánica y a la siembra de una gran variedad de frutas y verduras.
Ampliando horizontes
Una de las cosas que dejó en claro Prebístero Sandoval, es que en todos estos años que lleva trabajando en la zona de Mampote a tenido la fortuna de contar con una constante y apreciada clientela, por lo que con el pasar del tiempo decidió no sólo ofrecerles las ricas frutas sino que también añadió a su inventario un refrescante jugo de papelón con limón.
De igual manera, de un tiempo para acá vende hallaquitas de chicharrón y pollo, los cuales han causado sensación entre quienes ya los han probado, haciendo que la venta de éstos aumente considerablemente en horas de la mañana y mediodía.
Es por esto que el señor Sandoval, se levanta tempranito todos los días para cumplir con todos sus deberes matutinos para luego irse a instalar a eso de las 10 de la mañana para no dejar sin sus respectivas frutas a las personas que acostumbran a hacer una parada en su puesto para no llegar con las manos vacías a casa.
Marien Daniela Sierra
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