LaVoz. Cansados por la ineficiencia de los vigilantes y la inseguridad que reina en esta casa de estudio, los estudiantes decidieron como medida de protesta bloquear el acceso en rechazo al robo de dos carros dentro de este recinto académico, los cuales ocurrieron esta semana
En repudio al robo de dos vehículos, asaltos y otros actos delictivos dentro de la Universidad Santa María, ubicada en las adyacencias de la carretera Petare – Santa Lucía, los estudiantes decidieron alzar una vez más sus voces y ejecutar acciones de protesta en horas de la tarde de este miércoles, a fin de exigir a las autoridades de rectorado incrementar medidas de seguridad en esta casa de estudio.
La manifestación, que consistió en bloquear el acceso a la universidad generando colapso vehicular en los alrededores, estuvo protagonizada por estos alumnos quienes expresaron su descontento por aquellas políticas de seguridad no implementadas por el vicerrectorado.
Desde hace dos años se han registrado robos y asaltos en lo salones de clases, pero actualmente en aquellos áreas verdes desoladas, donde usualmente era un lugar para descansar, estudiar e inclusive conversar con amigos mientras esperan la próxima clase, el lugar se ha convertido en el blanco para la delincuencia.
Cuenta el estudiante Héctor Regio, que hace pocos se encontraba con dos amigos escuchando música sentado en la grama, cerca de la facultad de Ingeniería cuando de repente fueron sorprendidos por unos sujetos, quienes tripulaban en motocicleta y los despojaron de todas sus pertenencias.
Aunque parezca inaudito las denuncias fueron presentadas a través de un pliego ante el Vicerrectorado pero hasta ahora “seguimos en la espera de una solución a fin de recuperar la seguridad que hace un largo tiempo dejó de existir y cada día perturba la tranquilidad de la población estudiantil”, se quejó.
Robo de carros
“Exactamente eran las 12 del mediodía cuando dejé mi carro en el estacionamiento ubicado en la Facultad de Ingeniería y Arquitectura, después de tres horas de recibir clases , me dirijí hacía mi vehículo marca Caribe color gris, el cual no se encontraba”, narró Carlos Eduardo, estudiante.
Agregó que de inmediato buscó al vigilante y le preguntó la ubicación de su vehículo, pero alegó que no vio nada, pues según él “es imposible” percatarse de una situación sospechosa cuando existe afluencia de carro que entra y sale de la mencionada facultad cada 10 minutos.
El estudiante, indignado, expresó su molestia por haber sido objeto de un robo, al tiempo que lamenta que no ha escuchado que se implementarán medidas de seguridad en las próximos días, sólo “me garantizaron que el seguro del estacionamiento iba indemnizar el daño, con la compra de un nuevo vehículo”.
De igual forma destacó el universitario, que ante esta situación, el pánico y la preocupación se ha apoderado de los jóvenes, quienes huyen de aquellas zonas desoladas y prefieren utilizar como espacios de reposo, el cafetín y la feria de comida, pues es donde existe más volumen de gente.
“Yo estudio en la Facultad de Odontología y pesar que esta estructura se encuentra alejada de estos establecimientos, prefiero caminar cada vez que culmina una clase y dirigirme aquellos cafetines pues quedarme sentada en la grama en las afuera de la facultad representa un riesgo”, destacó otra estudiante.
Hasta en los autobuses
Durante los últimos tres años se han registrados varios asaltos en los autobuses, que se realizan el transporte para los estudiantes desde La California hasta la Universidad Santa María.
Y es que, de acuerdo a la versión de algunos universitarios el recorrido que dura unos 20 minutos representa para estos jóvenes en un calvario, pues se encuentran en un estado de alerta y preocupación, pues es rutinarios que los antisociales aborden las unidades y desvalijen de sus pertenencias a los pasajeros. Pese a que la comunidad educativa tomó medidas de prevención los resultados siguen sin reflejarse.
Mairy Chourio / mchourio@diariolavoz.net