El Papa Benedicto XVI manifestó, a través de un telegrama, su más sentido pésame y cercanía espiritual a los familiares de las víctimas de los «trágicos incidentes» en la cárcel de Uribana, en el estado de Lara, donde murieron 58 personas y otro centenar resultó herida.
El Pontífice señaló que reza por el eterno descanso de los fallecidos y anunció que está a la espera la «pronta y total» recuperación de los heridos. Asimismo, alentó a todas las personas e instituciones responsables a seguir trabajando «con espíritu de colaboración y buena voluntad por la superación de los problemas y así evitar en el futuro la repetición de acontecimientos tan dramáticos».
Benedicto XVI envió un telegrama a través del cardenal secretario de Estado de Su Santidad, Tarcisio Bertone, a Monsseñor Antonio José López Castillo, Arzobispo de Barquisimeto, informó el portal web de Glbovisión.
Finalmente, el papa invocó la protección de la Virgen María e impartió la bendición apostólica «como signo de consuelo y esperanza en estos momentos de tristeza».