Brillos, sonrisas y colores provenientes los niños que paseaban vestidos como sus héroes y princesas favoritos, este lunes llenaron al popular boulevar de alegría y el entusiasmo típico de estas fiestas mientras que funcionarios policiales de diferentes cuerpos de seguridad estuvieron desplegados a lo largo de la avenida
Un panorama colmado de colores y sonrisas fue lo que se vivió este lunes en el popular boulevard de Sabana Grande con motivo a la celebración del primer día de Carnaval. Aunque la fiesta inició desde el pasado sábado, pues muchas personas entusiasmadas con el asueto carnestolendo –principalmente niños-, se adelantaron a la llegada del Rey Momo y salieron a las calles a festejar luciendo sus mejores galas de fantasía.
Los más pequeños del hogar se convirtieron por este día en sus personajes favoritos. Animalitos, piratas, vaqueros, héroes, hadas y princesas se paseaban desde el Gran Café de Plaza Venezuela hasta Chacaito, disfrutando de las pequeñas atracciones que están dispuestas en cada cuadra y dándole alegría a estas festividades en las que, desde hace varios años, son los protagonistas.
Economía
Algunos niños estaban sin disfraz, sus representantes aseguraron que el precio de los atuendos estaban fuera de su alcance por lo que decidieron sólo salir y pasear para que la fecha no pasara “por debajo de la mesa”.
“Traje a mi niño para que se distrajera un rato, comiéramos helado y disfrutara de las actividades… No pude disfrazarlo porque todo era impagable, demasiado caro”, relató Elsa Rivas, quien vive en el barrio 5 de Julio en Petare y pretendía recorrer todo el boulevard antes que cayera la noche.
Pero para otros, los golpes de la economía no fueron una excusas para no llenarse del colorido típico de esta galas. Cecilia González, vistió a una de sus pequeñas de “Diosa de Mar”, un llamativo traje azul que incluía corona y cetro, todo hecho de material reciclable: bolsas, cds, cartón, entre otros; “sólo hace falta mucha creatividad” dijo.
“Se invierte más tiempo que dinero en la confección, pero es un traje único y bastante innovador. Todo el esfuerzo vale la pena”, comentó entusiasmada la progenitora de Vanesa Motisi de 8 años de edad.
Sin tanganas
Desde 2009 Sabana Grande era el punto de encuentro de bandas de violentos que utilizaban el spray mejor conocido como “tangana” para enfrentarse entre ellos y con el público en general. Por lo que en varias ocasiones estas actitudes terminaron en disturbios con consecuencias de heridos y varias niños extraviados. Fue por ello que año pasado el uso de este aerosol se decretó como “totalmente prohibido” en estos espacios.
Ante ello, actualmente unos 700 funcionarios, entre Policía Nacional Bolivariana, Policaracas y Guardias Nacionales estaban dispuestos a los largos del boulevard a fin de resguardar y velar por la seguridad de los transeúntes. Activando un plan que busca erradicar por completo el uso de las muy buscadas latas.
“Cuando vemos a un niño usándolas, le explicamos tanto a él como a sus representantes las posibles consecuencias del producto, como asfixia e irritación de piel y mucosidades, a fin manera de generar conciencia y que voluntariamente se desprendan del spray”, expresó Armando Ramírez, supervisor agregado de la Policía de Caracas.
Sin embargo admitió que es una labor ardua y difícil de lograr, pues al cuestionar a varios infantes sobre qué es lo que más disfrutaban del carnaval, no dudaban en responder rápida e inocentemente “echar y juzgar con espuma”.
Añoranza
Algunos abuelitos que acompañaban a su hijos y nietos en el paseo por Sabana Grande, añoraron las fiestas que se vivían en sus años mozos, donde el carnaval era una festejo de “gente grande”, ya que los templetes, caravanas y parrandas que se encontraban en la reconocidas calles caraqueñas exhibían un carisma y alegoría, que aunque sano, era sólo apto para mayores de edad.
“Ahora los niños son los que disfrutan. Pero nada que ver con lo que era antes, donde la gente se lanzaba a las calles a bailar hasta bien entrada la madrugada y nunca faltaba una ‘Negrita’ que te preguntara ‘¿a que no me conoces?’ para intrigarlo a uno… Pero claro, eran tiempos más sanos”, explicó cual historiadora Aura Rángel, vecina de la parroquia La Candelaria.
Buhoneros clandestinos
A pesar de la prohibición de vender o distribuir spray de confetti en el boulevard de Sabana Grande, varios buhoneros “clandestinamente” comercializaban el popular spray, camuflajeándose como transeúntes y vociferando de vez en vez “tangana tangana”. Este el artículo fue clasificado la semana pasada como “sustancia nociva” por la directora de PDVSA La Estancia, Beatrice Sansó de Ramírez.
Anabel Barrios Díaz / abarrios@diariolavoz.net
