Habitantes de varias sectores de la mencionada parroquia, se mostraron afectados por la cantidad desperdicios que se encuentran en cada esquina y zonas públicas, motivado al irregular servicio del aseo urbano, que dejó de prestar su servicio desde el pasado viernes
Tal parece que el servicio del aseo urbano, también se fue a celebrar las festividades carnestolendas en la parroquia La Candelaria del municipio Libertador, razón que movió a sus habitantes a reportar los focos de contaminación generados por la cantidad de basura que se encuentra en la diferentes aceras desde el fin de semana.
Carlos Julio Rojas, vocero principal del Frente de Ciudadanos en Defensa del Norte de Caracas, informó que tantos vecinos como comerciantes, han mostrado su descontento por el cúmulo de desperdicios que además de ocasionar repugnantes olores también contribuye con la proliferación de roedores e insectos.
Aseguró que el problema recae en dos falta la primera de ellas en el irregular servicio del aseo urbano y la segunda en la falta de cultura ciudadana en arrojar plena calle los objetos que ya no les son útiles, como neveras, lavadoras, muebles y cualquier tipo de enseres que se acumulan junto a los desechos sólidos.
El dirigente resaltó que si bien es cierto, son pocos los trabajadores o empresas que laboran los días feriados, de igual forma se generan desperdicios los cuales incluso aumentan hasta unas tres toneladas.
En este sentido, declaró que “sería conveniente que existiera una personal de relevo que trabajara durante estas fechas a fin de velar por el fiel cumplimiento de la limpieza en la comunidad”.
Un problema de insalubridad
Las bolsas de basura son parte del paisaje en esta zona, donde desde que el viernes no se recogen los desperdicios precisamente en las esquinas Puente Yánez, La Cruz, Ferrenquín, Puente Anauco, Mirador y El Candilito.
El problema perjudica también a los comerciantes principalmente a aquellos que su actividad económica es el expendio de alimentos. Motivado a las pestilencias y moscas que invaden sus locales, su clientela ha dejado de visitarlo.
“La mayoría de la gente desiste de almorzar en mi local, porque representa un desagrado comer con un olor repugnante, como también el espantar moscas mientras consume”, exclamó el propietario de un negocios de comida.
“Yo por ejemplo he optado por preparar los panes en horas picos, ya que sí lo hago en horas antes, se me pierden , debido a que están expuesto a las moscas que han nvadido mi establecimiento”, se quejó la dueña de una panadería.
Cansados de denunciar
En un recorrido realizado por el equipo reporteril del Diario La Voz, se pudo evidenciar el estado de abandono, en la que se encuentra dicha parroquia, en materia de sanidad. Pese a que los habitantes se quejaron de altos niveles de contaminación en la que se enfrentan, aseguraron que esta situación es de larga data, por lo que están casandos de pedir la intervención de las autoridades competentes y cancelar altas tarifas de aseo urbano que aún no ven reflejadas en un mejor servicio.
Rojas recalcó que en varias oportunidades han tenido que tomar las riendas del asunto y desarrollar ellos mismo la limpieza , a fin de eliminar esos fétidos olores, pero a los pocos días vuelve la acumulación de basura, concluyó.
A la luz de las velas
Durante estos dos últimas dos semanas se han registrado inesperados cortes de luz en La Candelaria, ocasionado daños en los artefactos eléctricos de algunos hogares, situación que ha mantenido a los vecinos molestos, debido que aún desconocen el motivo de la falla eléctrica.
Según reseñó el dirigente vecinal Carlos Julio Rojas, los repentinos cortes y su violento regreso ha obligo a los comerciantes invertir en plantas eléctricas, puestos que ya han perdido la cuenta de los bombillos quemados que han sido cambiados y de los aparatos eléctricos que fueron remplazados por este problema.
Mairy Chourio / Mchourio@diariolavoz.net / @mairychourio
